LD (EFE) El presidente peruano Alejandro Toledo no será sometido a juicio político después de que 57 diputados votarán en contra de la solicitud por supuestamente haber incurrido en los delitos de asociación ilícita para delinquir y contra la fe pública. Los legisladores desestimaron las conclusiones de la comisión investigadora.
Hace siete meses una comisión comenzó a investigar si la inscripción del partido de Toledo, "Perú Posible", se hizo ante la entidad electoral con rúbricas falsas, tal y como denunció una testigo que se acogió a la colaboración eficaz del Poder Judicial.
El pleno del Congreso decidió que las pruebas y documentos recopilados por la "comisión de las firmas falsas" se trasladen en calidad de "ayuda memoria" a la fiscalía que sigue el caso. Asimismo decidió que el próximo miércoles se reanudará la sesión para determinar la suerte del mandatario, después de que el Partido Aprista anunciara la presentación de dos mociones, una para que se denuncie constitucionalmente al gobernante y otra para que se le suspenda de sus labores.
El primer ministro y congresista, Carlos Ferrero, señaló que "para mí desde el principio estuvo claro que el presidente nunca pudo ser acusado ni se le puede investigar por este tema, porque al presidente no se le puede acusar de cualquier cosa".En tanto, el secretario general del Partido Aprista, Jorge del Castillo, advirtió de que Alejandro Toledo todavía puede ser suspendido por la denuncia de una inscripción con firmas falsas y dijo que ha sido inédito que un presidente "pueda ser investigado durante su período" de Gobierno.
