LD (EFE) En declaraciones a la radio Voz de Palestina, el jefe de negociaciones de la ANP, Saeb Erekat, declaró que el dinero del pago de impuestos y del cobro de derechos de aduana que retiene Israel a los productos que exportan los palestinos, no debe de ser retenido. Por ello, pidió a la comunidad internacional que presione a las autoridades de Tel-Aviv para que esos recursos sean entregados.
El jefe negociador palestino aclaró que Israel es agente de retención de impuestos de la ANP en virtud de un protocolo anexo a los Acuerdos Oslo de 1995, y señaló que "se queda con el tres por ciento de los impuestos y transfiere el resto" a los palestinos. Se trata de unos 34 millones de euros (unos 40 millones de dólares) que el Gobierno palestino emplea en su totalidad para pagar los sueldos de la administración.
El pasado domingo el Ejecutivo israelí decidió suspender la transferencia de impuestos a raíz del ingreso del grupo terrorista Hamas en el Parlamento y el papel que desempeñará en el futuro Gobierno palestino, que considera "un Gabinete terrorista". La medida supone la interrupción de transferencias a la ANP de los impuestos y tasas de aduanas que recauda para ella en virtud del Acuerdo de París de 1995 (protocolo económico y financiero del Acuerdo de Oslo).