LD (Agencias)
El comunicado de los fiscales timoreses señala que la acusación formal se interpuso el lunes pasado y que los hechos que se juzgan corresponden a los crímenes ocurridos en el distrito de Covalima entre enero y octubre de 1999. Los cargos presentados contra los acusados incluyen "homicidio, exterminación, tortura, persecución y deportación", entre un total de 31.
Indonesia ocupó Timor Oriental en 1975 después de que Portugal se retirase del territorio y mantuvo el control durante 24 años, hasta que los timoreses votaron mayoritariamente por la independencia en un referéndum organizado por la ONU el 30 de agosto de 1999.
La Unidad de Crímenes Graves acusó el pasado febrero en los tribunales de Dili, también de crímenes contra la humanidad, al general Wiranto, quien comandaba las Fuerzas Armadas de Indonesia durante al transición y 54 personas más. Entre aquellos inculpados figuran Abilio Soares, ex gobernador de Timor Oriental; los comandantes generales Zacky Anwar Makarim, Kiki Syahnakri y Adam Rachmat Damiri; los coroneles Suhartono Suratman y Noer Muis; y el teniente coronel Yayat Sudrajat. Los analistas han señalado que, pese al proceso legal abierto en Dili, Indonesia no permitirá que la joven nación juzgue a ninguno de sus militares.
Indonesia ocupó Timor Oriental en 1975 después de que Portugal se retirase del territorio y mantuvo el control durante 24 años, hasta que los timoreses votaron mayoritariamente por la independencia en un referéndum organizado por la ONU el 30 de agosto de 1999.
La Unidad de Crímenes Graves acusó el pasado febrero en los tribunales de Dili, también de crímenes contra la humanidad, al general Wiranto, quien comandaba las Fuerzas Armadas de Indonesia durante al transición y 54 personas más. Entre aquellos inculpados figuran Abilio Soares, ex gobernador de Timor Oriental; los comandantes generales Zacky Anwar Makarim, Kiki Syahnakri y Adam Rachmat Damiri; los coroneles Suhartono Suratman y Noer Muis; y el teniente coronel Yayat Sudrajat. Los analistas han señalado que, pese al proceso legal abierto en Dili, Indonesia no permitirá que la joven nación juzgue a ninguno de sus militares.
