La Policía vuelve a tomar las calles para reprimir nuevas protestas en Irán

Según el relato de los testigos, agentes de diversos cuerpos se han desplegado en el centro de la ciudad, principalmente en la calle Enguelab, frente a la puerta de la Universidad.

Varias web opositoras han animado a sus seguidores a concentrarse en esa zona para aprovechar la efeméride y renovar las protestas contra la reelección el pasado junio del presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, que la oposición reformista considera fraudulenta.

Además, como en ocasiones precedentes, voluntarios islámistas "basij", en motocicletas y en la mayoría de los casos sin uniforme, se han reunido en distintas partes de la capital, tanto en el centro como en el norte, según los testigos.

La Policía ha advertido que cualquier manifestación que no cuente con la autorización pertinente será reprimida con dureza, mientras las autoridades han prohibido a la prensa internacional salir a las calles del país para cubrir los acontecimientos.

Según los habitantes del centro de Teherán, la velocidad de acceso a internet ha sido reducida en esos barrios y la comunicación a través de teléfono móvil ha sido barrida en Teherán.

Los estudiantes, no obstante, planean movilizarse en el interior de los campus universitarios, donde en principio no pueden entrar las fuerzas del orden pero si los islámicos "basij", claves en la represión postelectoral.

Fuentes de las organizaciones universitarias y de la web reformista Mowjcamp han denunciado que varios estudiantes han sido detenidos en las últimas horas. Al menos dos mujeres partidarias del ex candidato presidencial Mir Hossein Musavi han sido arrestadas durante la represión de las manifestantes, que fueron convocadas por la oposición con motivo de los actos.

Los movimientos estudiantiles conmemoran el asesinato de tres estudiantes en 1953 durante la cruenta represión de una manifestación anti estadounidense ordenada por el entonces Sha de Persia, Mohamad Reza Pahlevi.

Desde que el pasado junio estallaran las manifestaciones en contra de los resultados electorales, la oposición ha aprovechado efemérides como "el día de Jerusalén" o el asalto a la embajada de EEUU en 1979 para retomar sus protestas.