
LD (Agencias) En una conferencia de prensa, Jorge Mas Santos, presidente de la junta directiva de la Fundación Nacional Cubano-Americana, se refirió a las Fuerzas Armadas de Cuba a cuyos mandos dijo que "tienen la oportunidad de prestar un generoso servicio a la patria estableciendo una autoridad transitoria cívico-militar que termine con la dictadura de los hermanos Castro"
Mas Santos afirmó que, según informes, hay integrantes de la cúpula cubana que no "quieren aceptar a Raúl como sucesor de su hermano porque no conducirá a Cuba hacia ningún camino nuevo". Una señal de esa división, indicó, es la ausencia pública de Raúl Castro, el sucesor, y otros importantes miembros del régimen que aún no han lanzado mensajes.
El líder de la FNCA pidió a los militares que se unan a los esfuerzos de los opositores de la isla para buscar una solución pacífica a lo que calificó como "nuestra tragedia nacional". Al ser preguntado si estaba planteando un alzamiento militar, respondió: "eso es una alternativa que tienen las personas, tanto militares como civiles". Pero, explicó, de instalarse un gobierno cívico-militar, deberá garantizar la seguridad nacional, el respeto a los derechos civiles de todos los ciudadanos, liberar los presos políticos, convocar a elecciones libres, multipartidistas y transparentes en un plazo prudencial.Chávez, el peligro
El líder del grupo más influyente del exilio cubano en EEUU pidió a la comunidad internacional que realice esfuerzos diplomáticos para impedir que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, intervenga en Cuba para afianzar a los sucesores de Fidel Castro. Aseveró: "Chávez, en su objetivo de expandir su Estado bolivariano, puede proveer apoyo económico a los sucesores de Fidel Castro e incluso ayuda militar". El venezolano, dijo, puede ser un "factor" de peso para sustentar la permanencia del régimen cubano aunque Fidel Castro ya no conduzca los destinos de la isla.
Mas Santos insistió en que el régimen venezolano "es un peligro y le pido a EEUU y a la comunidad internacional que mediante esfuerzos diplomáticos no permitan que Hugo Chávez intervenga en la temática cubana". Consideró que Cuba no puede seguir perdiendo su soberanía, "que ya se ha vendido a la antigua Unión Soviética y se sigue vendiendo a naciones extranjeras". Explicó que como parte de su estrategia, el FNCA mantiene contactos con varios países y líderes internacionales. Hasta el momento, destacó, se ha entrevistado con el ex presidente del Gobierno español, José María Aznar, y el ex presidente polaco, Lech Walesa, además de con los gobiernos de El Salvador, Nicaragua, República Dominicana, España, Francia y Checoslovaquia.
Presión contra disidentes
El líder cubano también se refirió a las organizaciones de disidentes en Cuba sobre quienes, denunció, se ha incrementado la presión del aparato represivo de Castro. Dijo que tienen conocimiento de que La Habana convocó a las llamadas fuerzas de elite (contingentes de respuesta rápida y tropas especiales) y precisó que esos grupos "están en máxima alerta para enfrentar lo que llaman la guerra de todos los pueblos, que es evitar una invasión de EEUU, y para aumentar la represión contra la disidencia interna".
En el mismo sentido habló Javier de Céspedes, presidente del Directorio Democrático Cubano, quien señaló en un comunicado que "el primer blanco de los ataques de la policía política" son los prisioneros políticos y los cubanos en la isla que luchan por los derechos y la democracia. "Llamamos la atención de la comunidad internacional y de los cubanos para que no aparten sus ojos de ellos".
Precisamente, en Cuba el coordinador nacional de los llamados Comités de Defensa de la Revolución (8,2 millones de afiliados) llamó a incrementar la "vigilancia". La organización anunció que intensificará la guardia veinticuatro horas al días en centros laborales, granjas, cooperativas, vecindarios, según una información divulgada por la emisora local Radio Reloj. Al crear los CDR, el 28 de septiembre de 1960, Castro dejó claro su objetivo: "Que todo el mundo sepa qué es y qué hace el que vive en la cuadra y qué relaciones tuvo con la tiranía, a qué se dedica, con quién se junta, en qué actividades anda". Desde entonces, se han multiplicado y han cumplido fielmente con su misión, al actuar como los "ojos y oídos" de la dictadura en cada cuadra (manzana).