Menú

Alarma en el Gobierno por el deterioro de la imagen del Rey

Gobierno y PP optan por echar agua al incendio real: "No vamos a entrar en la polémica". Preocupa el deterioro que pueda sufrir la imagen del monarca.

Tanto en Moncloa como en Génova13, sede del PP, admiten que la imagen del Rey cazando elefantes en el peor momento de la crisis económica no es, de lejos, la idónea. Es "imposible defender lo indefendible", exponen a las claras. De igual forma, altos cargos de uno y otro lado son conscientes de que esa fotografía "perjudica a la institución", en un momento en el que la Zarzuela está sometida a una presión constante y con el CIS dándole su primer suspenso. Pero, hecho este análisis, sin que una palabra se pueda entrecomillar a sus autores, el mensaje es nítido: "Abrir este debate no puede traer nada bueno".

A micrófono abierto, María Dolores de Cospedal fue la encargada de capear la tormenta mientras el jefe, Mariano Rajoy, rehuía a una nube de periodistas en un acto con empresarios. No fue una comparecencia sencilla, una vez "el PP es el partido que sustenta al Gobierno" y "no puede hacer demagogia fácil", en voz de un portavoz autorizado. La secretaria general del PP se afanó una y otra vez en echar agua al fuego creado, a pesar del evidente debate político y social abierto a raíz de la caída de don Juan Carlos.

"Desde el PP no vamos a entrar en la polémica que algunos están tratando de alimentar. Me remito al comunicado de la Casa del Rey y a lo que ha comentado el Gobierno. Ahí me voy a quedar porque no vamos a dar pie a polémicas", expuso la número dos, preguntada, en concreto, por Alfredo Pérez Rubalcaba. No consiguió saciar a los periodistas, que una y otra vez le abordaron por el peliagudo asunto, en general, y sobre la comunicación Zarzuela-Moncloa, en particular.

Sobre el segundo de los puntos, Cospedal dijo en repetidas ocasiones: "Yo entiendo que la relación es muy fluida", que traducido significa que Rajoy sabía donde se encontraba Su Majestad en el momento del suceso. "Nunca he visto al Gobierno explicando las actividades privadas del rey. Sería la primera vez de la historia", añadió, defendiendo la confidencialidad del trayecto. "Me remitido otra vez al Gobierno y a la Casa Real", contestó, casi por sistema.

En este sentido, la secretaria general -de enorme influencia y con comunicación permanente con el presidente- pidió prudencia y cuidado a la hora de abordar un debate que, confiesan en el PP, es "extremadamente delicado", más aún en la situación que atraviesa el país. Así, criticó a quienes "han tratado de dar una interpretación que no responden a palabras textuales", en relación a la respuesta del Ejecutivo -sobre si sabía o no dónde estaba el Rey- o del propio partido, que pareció contradecir a Zarzuela el domingo.

Cospedal entró en el fondo de la cuestión: "Creo que utilizar un acontecimiento concreto para crear dudas a las instituciones no es hacer un favor a la democracia", sentenció. Y, al hilo, muchas fueron las voces que se pronunciaron. "De lo que estamos hablando es del Rey y de sus capacidades para reinar", arrancó un diputado, en conversación informal, para añadir: "En estos momentos, abrir ese debate sería tanto o más como abrir la caja de los truenos". Un "polvorín", corroboró un asesor de Moncloa.

Por ello, si algo esperan desde el Ejecutivo, y por ende desde el PP, es que las aguas vuelvan a su cauce, y así se lo hicieron saber al PSOE, en su petitoria de rehuir de polémicas. La orden también se extendió de puertas para adentro. Un hecho que no oculta la "preocupación" por el deterioro del papel del Rey. "Ya no estamos hablando de Urdangarín, de Letizia o del nieto, estamos hablando del Rey", afirmó un cargo popular, sobre el que ha sido el tema recurrente de las últimas horas, más allá de la crisis. Oficialmente ni se plantea que el monarca abdique en don Felipe de Borbón, aunque de la idoneidad de este movimiento se hable, y mucho, entre bambalinas.

El Ejecutivo asegura que no va a moverse de su sitio, el de la defensa de la Corona, a pesar de la "desafortunada" imagen. Ahora bien, fuentes solventes quisieron dejar claro que este episodio no desgasta al Ejecutivo, sino -en todo caso- a la Monarquía. Cospedal llegó a relacionar una cuestión sobre el Rey con la semana "decisiva" del Ejecutivo, centrada en explicar las reformas emprendidas y en llegar a acuerdos con comunidades autónomas para ajustar el presupuesto en Sanidad y Educación. Sea como fuere, Rajoy aspira a que la situación se normalice.

Temas

En España

    0
    comentarios
    Acceda a los 23 comentarios guardados