L D (EFE)
El presidente del Gobierno, José María Aznar, instó este lunes al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, a que pida disculpas por haber calumniado sin pruebas al PP y haber mentido a los ciudadanos con motivo de la crisis de la Asamblea de Madrid. Aznar hizo esa petición en el acto en el que participó en apoyo a la candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y en defensa de la igualdad de oportunidades.
El jefe del Ejecutivo dijo que inmersos ya en la campaña de los nuevos comicios, él tiene la "curiosidad" de saber cuál era la trama que los socialistas tenían montada en relación con la crisis de la Asamblea madrileña provocada por los diputados autonómicos Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez. Dijo que "sería muy interesante que el actual secretario general del PSOE pidiera disculpas por haber acusado al PP de organizar un golpe de Estado y por haberle dicho a la sociedad española que, lo que en definitiva tenían ellos montado en su partido, era lo más grave que había sucedido en España desde el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981".
Para Aznar, "una persona responsable y medianamente seria" debe pedir disculpas por ello, al tiempo que señaló que si Zapatero dijo que tenía pruebas "irrefutables" para avalar sus acusaciones y no las presenta nunca, "debe disculparse dos veces: una por haber calumniado al adversario y otra por haber mentido a los ciudadanos". El presidente del Gobierno dijo que también le gustaría que los socialistas dieran cuenta de qué les debían a las "manzanas podridas" (en alusión a Tamayo y Sáez), por qué las incluyeron en las listas electorales y por qué no las retribuyeron "como, al parecer, habían acordado".
Aznar dijo que los socialistas desean gobernar en coalición con IU en Madrid "porque solos no gobiernan ni en casa", pero no se atreven a decir con qué programa y, frente a ellos, situó al PP como ejemplo de garantía de buen gobierno en contraste con la "chapuza" a la que pueden llevar otras formaciones. Por ello, instó a que los madrileños acudan a las urnas el próximo 26 de octubre y se mostró convencido de la victoria de Esperanza Aguirre en esos comicios con una mayoría suficiente para gobernar.
El presidente del Gobierno se refirió a la apuesta por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres que el PP ha hecho en todos los ámbitos y destacó especialmente el político y el laboral, aunque instó a seguir trabajando y no conformarse con lo conseguido. Testigos de esas palabras fueron cuatro de las cinco ministras de su actual Gobierno: Elvira Rodríguez, Pilar del Castillo, Ana Pastor y Julia García Valdecasas.
Aznar defendió las formaciones que, como el PP, garantizan la cohesión y la integridad del país frente a las que van "por mal camino" e instó a reconocer los cambios experimentados en España en los últimos años. Unos cambios que, dijo, se han visto de forma notable en Madrid, una Comunidad que recordó que ha pasado de tener un presupuesto de 3.362 millones de euros en el año 1996 a contar en la actualidad con uno de 12.500 millones.
El jefe del Ejecutivo dijo que inmersos ya en la campaña de los nuevos comicios, él tiene la "curiosidad" de saber cuál era la trama que los socialistas tenían montada en relación con la crisis de la Asamblea madrileña provocada por los diputados autonómicos Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez. Dijo que "sería muy interesante que el actual secretario general del PSOE pidiera disculpas por haber acusado al PP de organizar un golpe de Estado y por haberle dicho a la sociedad española que, lo que en definitiva tenían ellos montado en su partido, era lo más grave que había sucedido en España desde el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981".
Para Aznar, "una persona responsable y medianamente seria" debe pedir disculpas por ello, al tiempo que señaló que si Zapatero dijo que tenía pruebas "irrefutables" para avalar sus acusaciones y no las presenta nunca, "debe disculparse dos veces: una por haber calumniado al adversario y otra por haber mentido a los ciudadanos". El presidente del Gobierno dijo que también le gustaría que los socialistas dieran cuenta de qué les debían a las "manzanas podridas" (en alusión a Tamayo y Sáez), por qué las incluyeron en las listas electorales y por qué no las retribuyeron "como, al parecer, habían acordado".
Aznar dijo que los socialistas desean gobernar en coalición con IU en Madrid "porque solos no gobiernan ni en casa", pero no se atreven a decir con qué programa y, frente a ellos, situó al PP como ejemplo de garantía de buen gobierno en contraste con la "chapuza" a la que pueden llevar otras formaciones. Por ello, instó a que los madrileños acudan a las urnas el próximo 26 de octubre y se mostró convencido de la victoria de Esperanza Aguirre en esos comicios con una mayoría suficiente para gobernar.
El presidente del Gobierno se refirió a la apuesta por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres que el PP ha hecho en todos los ámbitos y destacó especialmente el político y el laboral, aunque instó a seguir trabajando y no conformarse con lo conseguido. Testigos de esas palabras fueron cuatro de las cinco ministras de su actual Gobierno: Elvira Rodríguez, Pilar del Castillo, Ana Pastor y Julia García Valdecasas.
Aznar defendió las formaciones que, como el PP, garantizan la cohesión y la integridad del país frente a las que van "por mal camino" e instó a reconocer los cambios experimentados en España en los últimos años. Unos cambios que, dijo, se han visto de forma notable en Madrid, una Comunidad que recordó que ha pasado de tener un presupuesto de 3.362 millones de euros en el año 1996 a contar en la actualidad con uno de 12.500 millones.