El debate (oportuno) abierto por Francisco Fernández Ochoa en torno al "caso Muehlegg" está adquiriendo tintes histérico-dramáticos que desvían la atención de lo que es importante. ¿Qué tendrá que ver Niurka Montalvo en esta película? No estamos para lanzar cohetes, pero el atletismo español ya ofrecía signos vitales antes de que llegara a nuestro país la fenomenal atleta cubana. ¿Y Dujshebaev? El balonmano nos ha dado muchas alegrías, tanto a nivel de clubes como de selección. Talant es el mejor jugador del mundo en su puesto, pero, antes de que decidiera nacionalizarse, España ya "pitaba" en el concierto internacional. ¿Y Catanha? Creo recordar que, sin su participación, la selección nacional ya consiguió algunas metas importantes. A nivel de clubes tampoco nos podemos quejar.
Dice Herminio Menéndez que debemos valorar que Johan "elija defender a España"... ¿Y quién no lo valora? El presidente de la federación española de deportes de invierno valora tanto esa circunstancia que le ha colocado cuatro preparadores personales. ¿Cabe mayor preocupación? No creo que F.O. haya dudado tampoco de la legalidad de la nacionalización española de Muehlegg. Johan es legalmente español. Punto. Me parece que no van por ahí los tiros. Lo que dice Paco es que el éxito personal, indiscutible y magnífico de Juanito no debe impedirnos ver el estado deplorable de nuestro esquí. No podemos descorchar demasiadas botellas de cava puesto que la gesta de este alemán nacionalizado español no es un índice, en modo alguno, del nivel de los deportes de invierno en España.
Desconozco cual será el nivel de conocimiento que la Ministra Pilar del Castillo tenga sobre patinaje artístico, hockey o snowboard, pero da la impresión de que ella –y desde luego su secretario de Estado– tienen otras preocupaciones prioritarias. La primera, resaltar la españolidad de Muehlegg ("un gran español", ha dicho la Ministra); la segunda, pasar por el "fotomatón" de Soldier Hollow. Personalmente me preocupan otros grandes españoles como, por poner un ejemplo, el cántabro Juan Jesús Gutiérrez. El otro día concluyó trigésimo octavo en la prueba de 20 kilómetros persecución. O el vasco Haritz Zunzunegui, cuadragésimo segundo en los 30 kilómetros estilo libre. O Iker Fernández, vigésimo tercero en la final de "half pipe" de snowboard. ¿Cómo están ellos? ¿Con qué ayuda trabajan? ¿Tienen algún apoyo o no lo tienen? ¿Duermen en el "Mesón del Peine" o en un hotel de cinco estrellas? El debate sigue abierto.
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