Es el pago por la Sarkosilla.
Partiendo de la base de que no existen guerras ilegales (¿qué ley permite o prohibe la guerra?) ni injustas, que eso es una gilipoyez mántrica progre, hay que admitir que las guerras suceden siempre porque a uno de los bandos le interesa que suceda, y el otro bando se defiende. Al provocador de la guerra le pueden mover muchos y diferentes motivos, económicos, estratégicos, de prestigio.....para iniciarla.
En este caso de Libia, que lo que había era una insurrección contra el poder establecido y el consiguiente aplastamiento de esa insurrección, es decir, NO HABÍA GUERRA, los que han iniciado la guerra son los occidentales, en concreto Francia. A Francia le interesa mucho, estratégicamente y económicamente, esta guerra. A USA no tanto. De hecho, Obama ya se está replanteando la situación. ¿Y a España?, ¿qué puede ganar España en esa guerra?, ¿hay intereses españoles amenazados en Libia?...
Creo que el bloguer tiene razón y España se ha embarcado en una estupidez que esperemos no nos cueste cara.
A Irak se fue por el mismo motivo que a Libia: a por el petróleo. Para Israel era más peligroso Irán o Siria que Irak. No había armas de destrucción masiva, y el gas y las armas químicas se las dieron los occidentales para que matara iraníes. Ahora dicen que hay masacres en Libia que nadie ha visto. ¿Habíais visto las armas de Irak? Y después de tantos años, cuando se ha descubierto que todo era mentira ¿aun así seguís defendiendo la invasión?
Me fascina la capacidad de autoengaño de algunos. Hace quince días, no más, me llamaban enemigo de Occidente y tonto útil por decir lo mismo que hoy dicen quienes me insultaban; lo mismo: que en Libia no pintamos nada. Pero hasta que no aparece la voz de LD alzándose contra esa invasión (más por estar el PSOE detrás que por otra cosa) nadie es capaz de pensar por su cuenta.
No hay razón para invadir Libia, dicen por ahí. Sí, sí que la hay, y lo sabéis, pero decís que no hay razón porque es la misma que la Irak: el petróleo, ahora que escasea. Después de todo lo que ha caído hace falta mucha desvergüenza, pero mucha, para decir que a Irak se fue a llevar la democracia o a proteger a Israel.
Gran artículo sobre por qué en Iraq si era conveniente la intervención occidental y en Libia no, además en el interés de España era ventajoso apoyar a Bush al contrario que ahora, que pudiera ser que sólo estemos ayudando a las aspiraciones francesas en África. En su momento me pareció bien la guerra de Iraq, ya que Sadam Hussein realmente suponía una amenaza internacional desde varios frentes, además de las armas químicas que supuestamente tenía, y realmente las tuvo en el pasado, finalmente resultó que era una estrategia de disuasión. Ante lo que decía la izquierda en aquel momento de que allí estábamos por el petróleo, no pienso que fuera así, o al menos no como el motivo prioritario de la guerra (intereses hay muchos y nadie sabe realmente como son de grandes). En cambio en Libia, hay algo que no cuadra, dicen que la intervención se ha hecho por la masacre de Gadafi contra los libios, ¿es que Sadam no masacró a los kurdos?, o sin ir más lejos, hay muchos países en África con matanzas mayores. No confío en tanto buenismo y menos viniendo entre otros de Francia, a la que no le importaron mucho los kurdos. Por otra parte Gadafi no es actualmente, una amenaza internacional como sí lo era Sadam, todo esto es otra guerra civil más, luego ¿por qué meterse?
Puede que esta ocasión la motivación principal sí sea el petróleo e intereses estratégicos de algunos países, que desde luego nada tienen que ver con España. Cuando Zp podía haber hecho gala de una de sus supuestas señas de identidad, el pacifismo, va y entra en una guerra injusta.
¿Objetivos?
Al poderoso se le respeta. Al menos, se le teme.
Pero al lacayo del poderoso se le desprecia y no se le teme en absoluto por si mismo.
España no tiene Ejército. España no pinta nada en Libia, no porque tengamos o no tengamos intereses que defender allí; es que no tenemos capacidad para decidir nada.
Lo único que podemos hacer, y que estamos haciendo, es actuar como lacayos de Obama y Sarkozy. Que quede claro que nos arrastramos ante la voluntad del poderoso para machacar al que parece caído en desgracia.
Los libios humillados no nos perdonarán, ni los gubernamentales ni los rebeldes. Al contrario, nos verán como el eslabón débil, el más despreciable y el más fácil de atacar.
Y tendrán razón.
Tal vez, Pío, cupiera hacer un paralelismo histórico, remontándonos al Medievo, entre el desarrollo económico y político de los países del Magreb y los sureuropeos -en contraste con los del centro y norte-. Y, muy en especial, con el de España. En la medida en que se puedan vincular esos desarrollos a la secularización de los pueblos y a la adopción de la democracia como sistema de rección, para nuestra prosperidad futura el éxito de las revoluciones actuales en los países del Norte de África sería, me parece, altamente deseable. Por sus especiales características estructurales y políticas, Libia, que sería peligroso dejarla excluida de esos procesos socio-políticos, necesita un tratamiento especial. Bien es cierto que, como Vd. con agudeza señala, el caballo puede derribar al jinete; aunque no creo que el sentido de la Historia se pueda, en su tendencia general, invertir, y acabarán surgiendo nuevos jinetes que dominarán a su cerril montura. Ciertamente, se me podría decir que "largo me lo fiáis", y que tanto en el corto como en el largo plazo su análisis es correcto y pragmático; pero, según creo, ya va siendo hora de que nos fijemos objetivos geo-estratégicos transgeneracionales, lo que conlleva un concepto inmanente de la nación, al modo del "maquiavelismo" francés. En definitiva y en mi opinión, algo, que puede resultar mucho, se nos ha perdido en Libia.
Con respeto y afecto.
Más claro, el agua.
Me encanta lo de mamarracho iluminado, suena mejor que Z.
Es muy probable que tras todos las revueltas libias estén AlQaeda y Hezbolá.