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El 'mandaMás'

El Tribunal catalán le ha pegado un capotazo al toro y lo ha devuelto, casi entero, al Tribunal Supremo. Le ha faltado valor

Davidlib dijo el día 10 de Marzo de 2012 a las 01:45:

Las comunidades lingüísticas son aquellas que se identifican por una historia y un ámbito territorial específicos, donde sus integrantes se autoidentifican como pueblo, con características culturales propias en cuyo seno se ha desarrollado una lengua común como medio de comunicación entre sus miembros.
Esta definición de aplicación general, sirve bien para identificar tanto a países, como a estados y naciones. En España, auto proclamada un estado social de derecho constituido por nacionalidades y regiones, es el fruto de una larga historia como realidad política. Las características geográficas, culturales e históricas de España son diversas y no se comprenderían sin la comunión de todas ellas, lo que explica que en su seno se hayan desarrollado también diversas lenguas, como el vasco, el gallego o el catalán.
Sin embargo, esta comunidad de relaciones históricas, culturales y lingüísticas, en un esfuerzo de generosidad y reconocimiento de las realidades que la componen, se ha dado así misma instrumentos de autogestión, no con el propósito de desmembrar su propia realidad, sino como anclaje de una idea compartida, cuyos ciudadanos adquieren, a través de la autonomía política, mayores cauces de participación en la gestión de sus propias vidas. Este acercamiento de las instituciones a la ciudadanía es un ejemplo de organización política moderna, responsable y responsabilizadora de sus ciudadanos en su sostenimiento del proyecto común. Este es, sin duda alguna, un ejercicio de democracia real, que ha sido contestada, por desgracia, con actitudes egoístas y segregadoras que no buscan más que el beneficio propio, una ansia de poder desmedido que justifica, aunque para eso sea necesario, la hipocresía de sus gobernantes e incluso la confrontación entre sus ciudadanos que no podemos de ninguna manera tolerar.

maskedfa dijo el día 9 de Marzo de 2012 a las 14:16:

No es que no lo vean, es que no lo quieren ver; ni los del PP ni los del PSOE, tengan mayoría o necesiten alianzas.
Gane quien gane las elecciones nacionales, siempre las gana CiU. Pujol hizo, cuando sacó a la gente a la calle por su cagada de Banca Catalana, la mejor inversión de su vida y de las vidas de cuatro generaciones de pujoles más. Y, lo más triste, es que en el resto de España, esa mercancía dañina, se está comprando como buena.
Haría falta un milagro para cambiar esto. Y no van a ser la Sánchez Camacho ni el ministrillo Fernández quienes expliquen al actual gobierno nacional, con mayoría absoluta, que seguirán haciendo lo mismo en las escuelas catalanas: humillar a los niños castellanohablantes, maltratarlos sicológicamente y convertirlos en carne de cañón drogadicta por pobres y castellanos.
Lo tienen en la mano: basta con recuperar competencias educativas, convocar oposiciones nacionales, exigir nivel C de castellano a quienes aspiran a trabajar en el resto de España...
No lo harán. Y no saldremos nunca del lugar de la humillación permanente en que nos han colocado.

ANP dijo el día 9 de Marzo de 2012 a las 10:57:

Yo llevo toda la vida diciendo que esto no es una lucha jurídica. Es una lucha sociológica, ideológica, cultural, etc. Pero bueno, seguid dandoos cabezazos con las sentencias si sólo sabéis ver las cosas por un solo punto de vista. Seguiremos siendo marginales toda la vida

ANS dijo el día 9 de Marzo de 2012 a las 04:47:


CURIOSIDAD ESCATOLÓGICA

Es curioso que el TSJC se cague por la patilla
ante las presiones de unos históricos caganers
que cuando vienen mal dadas acostumbran
a huir despavoridos por las alcantarillas
(ej. Josep Dencás y su tropilla de ERC, etc).

Entre caganers anda el juego, pero esperemos
que el TRIBUNAL SUPREMO le enmiende la plana al TSJC
y se cumplan sus sentencias y no a la inversa que es
un hecho inaudito e insólito en el mundo de la jurisprudencia.

Espero con gran curiosidad las opiniones al respecto del
Ministro Fernández Diaz, de la Sánchez Camacho, etc.
sobre el fallo (de fallar).