"Cree el ladrón que todos son de su condición".
El regresismo neo-marxista, mediante un proceso de proyección psíquica, deriva los fantasmas de los genocidios de Lenin, Stalin, Mao, Pol Pot, etc. contra su presunto polo opuesto, pretendiendo ignorar que son lo mismo.
Según Reinhard Gehlen (jefe de la Gestapo, que trabajó tan ricamente como "asesor" del presidente Truman, sin pasar por Nüremberg, naturalmente), el régimen nazi y el soviético eran como positivo y negativo de una misma fotografía.
No en vano Stalin y Hitler pertenecían a la misma sociedad secreta, la sociedad Thule (teosofistas). Dos "hermanos" satanistas, uno a cada lado de un enorme tablero de ajedrez, disfrutando de casi 100 millones de peones caídos.
(Esperemos que "El gran tablero mundial" de Brzezinski no tenga similar desarrollo de partida.)
Por lo que respecta a los "regres", basta ya de hipocresía y de proyectar la culpa en supuestos adversarios: soviéticos y nazis eran (son) exactamente la misma basura, destinada al crematorio de Satanás.
Hace sólo 24 horas, en la tertulia de Cesar Vidal se hablaba de un asesino nazi, del estilo del de Noruega. No hablaron de musulmanes, por supuesto. Sólo de nazis...
Por cierto, el de Noruega, no es nazi, sino miembro de la maosnería, cosa que se medio oculta.
En el mundo Islámico la Masonería también existe.