Querido Pablo:
Vaya por delante que no salgo de mi asombro –más bien indignación- al comprobar que, a diferencia de otras democracias con más solera como EEUU o Reino Unido, en España la disciplina de voto es prácticamente inquebrantable. Es sintomático de la enfermedad que padece el PSOE que esa ruptura se haya producido antes en la oposición que en el Gobierno que ha ejecutado los más duros recortes de nuestra historia, hasta la fecha.
Lo más grave, sin embargo, no es el hecho en sí, sino que refleja el cómo están y el cómo van a estar en el futuro cercano. Se cuenta que la reunión del grupo parlamentario socialista del martes, el mismo día en que los 14 díscolos se hicieron con el título, fue una de "las más encendidas de la historia". La gran mayoría de los diputados, liderados por Alfonso Guerra, lanzaron una cascada de duros reproches que , previamente, se había producido el lunes en la reunión de la Ejecutiva en Ferraz. El dictamen mayoritario es que el PSC "asume antes la doctrina nacionalista que la socialista" y Pere Navarro "no puede continuar en esta senda de error tras error".
Era la posición mayoritaria, pero las divisiones en el PSOE, si no son en el fondo son en la forma, y de ahí que cuando intervino José Blanco para sumarse a la petición de la romper con el PSC y desembarcar nuevamente las siglas de PSOE en Cataluña, hubo quien dijo por lo bajini: "Tú cállate, que estas imputado por corrupción".
Caso Blanco al margen, el protagonismo se lo llevó ella: Carmen Chacón. La cabeza de lista por Barcelona que no dijo ni mu en noviembre cuando el PSC incluyó el derecho a decidir en su programa electoral de las catalanas 2012, de repente, enarboló la bandera de sus "principios y convicciones" como si el tema surgiera de la nada. "No voy a elegir. No voy a romper el compromiso que adquirí con los ciudadanos", dijo quien, realmente, lo estaba incumpliendo, porque en su programa figura el derecho a decidir. La cuestión es que, con su sonrisa habitual –más pronunciada si hay cámaras delante-, volvió a llevarse la foto, el titular y la incoherencia de prometer "seguir luchando" sin utilizar el arma de un parlamentario: el voto.
En los pasillos, algunos desde el PSC dejaban caer que otros querían haber seguido sus pasos. Como Germán Rodríguez, también diputado catalán, ex número dos de Chacón en el Ministerio de Defensa, que finalmente sucumbió a las presiones de Barcelona. Pero también se hablaba de un "pacto oculto" con el que los dudosos habrían dejado "toda la visibilidad a Carme para proyectar su imagen nacional. Así se apunta ella el tanto". Y así de paso, se abre una nueva brecha para Rubalcaba. Curioso es desde luego que el portavoz del motín, Francés Vallés, fue uno de los que movió la campaña de Chacón para el 38 Congreso de Sevilla contra Rubalcaba. Recuerdo sus palabras el día en que el actual líder ganó en Sevilla (5 de febrero): "A partir de hoy comienza la remontada".
Siguiendo con el pasado y las curiosidades te cuento también sobre José Zaragoza. El ex lugarteniente de Carmen Chacón en la campaña a liderar el PSOE y que ha sido ‘dimitido/cesado’ de su cargo en la dirección de grupo socialista en el Congreso. No así –y aquí va la última curiosidad- ,Teresa Cunillera, la socialista catalana que fue vicepresidenta primera con José Bono, hoy vicepresidenta segunda de la Cámara baja y perteneciente a la rama pro-Rubalcaba y a la línea moderada del PSC. Dicho de otra forma, Rubalcaba corta la cabeza del amigo de Chacón, pero no la de los suyos. Y justo después se apresura a decir que Carme se ha equivocado". Un cortafuegos tras otro para frenar las llamas que siguen incendiando Ferraz. Dentro de poco, sólo quedarán cenizas.
Un beso, Ketty