"Nos vamos a ir a la caseta porque no les aguanto... no les aguanto que no corramos, que no trabajemos, que no peleemos, que no estemos... Escúchenme, me echan a mí. A mí me importa un huevo que me echen. Primero porque tengo 2000 equipos donde ir, pero no me echan por hacer el gilipollas que es lo que está haciendo este grupo. Este grupo está haciendo el gilipollas... nada más".
El párrafo anterior corresponde a una charla que Don Luis Aragonés dio en pleno entrenamiento a sus jugadores en la temporada 2002/2003, la primera posterior al regreso a Primera División. Paró el entrenamiento, les abroncó delante de toda la prensa que grabó la escena e incluso Hibic, central por aquel entonces del Atlético, miraba alucinado a las cámaras en modo "madre mía, lo está haciendo delante de las televisiones". El caso es que el Atlético hizo una mala temporada y los dirigentes colchoneros, los mismos que están ahora, se unieron a las críticas de prensa y parte de la afición que veían que Aragonés era el único culpable y le echaron. Después de Luis llegaron a la nave rojiblanca Gregorio Manzano, César Ferrando, Carlos Bianchi o Pepe Murcia. No llegaron los Guardiola, Klopp o Luis Enrique de la época. Llegaron Manzano, Ferrando, Bianchi y Pepe Murcia. Fue ahí cuando la afición se giró al palco y de paso también miró al césped. Pero antes, como les había sugerido todo el mundo, la culpa era solo de Luis.
Lo llevo diciendo muchos meses y lo seguiré manteniendo. El Atlético tiene un fallo multiorgánico. Le podemos y debemos dar un tanto por ciento alto al Cholo Simeone ya que es el líder. Lo hago. Le doy ese tanto por ciento de culpa, sin embargo, el Cholo es uno de los culpables, pero ni de lejos es el único dentro de esta situación. Esta película ya la he visto, señoras y señores. La vi en el cine del Vicente Calderón y la veo ahora en la sala del Metropolitano. Es un clásico de la videoteca rojiblanca. Se empieza primero echando al entrenador, se da cierta cancha a los jugadores y cuando la situación termina de estallar se ataca a los futbolistas, después se gira la cabeza hacia el palco y se acaba por destruir absolutamente todo.
El Cholo toma decisiones equivocadas. Muchísimas últimamente. Se está encabezonando en asuntos como los de Saúl o Joao Félix que no tienen sentido, pero que a nadie se le olvide todos los cambios que se han hecho en los últimos meses y no ha funcionado nada. Pongo ejemplos. El problema era Koke y el capitán lleva varios partidos sin jugar. El problema era jugar con cinco atrás y ante el Oporto se jugó con cuatro. El problema era que Griezmann solo jugaba 30 minutos y ahora ya juega los noventa. El problema era la defensa y ahora están los titulares. El problema era Joao como suplente y ante el Oporto fue titular. El problema era que no ponía a Kondogbia y el ex del Valencia solo descansó ayer por molestias. El problema era que Cunha merecía jugar y no jugaba, pero ahora que está jugando no tiene impacto en el juego. El problema era Marcos Llorente de lateral aunque le hemos visto como interior este año y tampoco ha funcionado. ¿Qué le falta por hacer al Cholo? Simeone ha probado todo salvo mandar a la grada a más de uno y muchos se lo merecen. Grada o permitir que se concentren ya con sus selecciones de cara al Mundial, porque vaya pretemporada mundialista se están haciendo varios con todos los gastos pagados por el Atlético.
¿De verdad alguien se cree que echando al Cholo Simeone hoy el rendimiento de la plantilla va a ser radicalmente diferente mañana? ¿Que jugadores como Hermoso o Felipe serán rocas defensivas, Joao ganará el Balón de Oro, Cunha y Morata pelearán por el Pichichi, Giménez y Savic no se lesionarán, Saúl volverá a ser el que era y De Paul jugará mejor con el Atlético que con Argentina? ¿Alguien se lo cree? Que le pregunten al Sevilla si la culpa era solo de Lopetegui. "Ya David, pero el Chelsea ganó una Champions echando a su entrenador y fichando a Tuchel". Sí, claro que sí. Y el PSG echó a Tuchel creyendo que así ganaría la Champions y lo que hizo Tuchel fue ganarla ese mismo año con otro equipo diferente.
Este Atlético es un zombie por Simeone, por los jugadores y por la directiva. Que nadie se olvide del palco, por favor. Enrique Cerezo dejó clara ayer la exigencia que le espera al Atlético con o sin el Cholo. Dejó patente la ambición de los directivos: "De 12 años hemos pasado 10 la fase de grupos, en 2 años no pasarla es para estar tranquilos y no tener problemas". Este es el Atlético de Madrid al que muchos piden que eche a Simeone y se reconstruya. El que ve como normal lo que ha pasado este año. ¡No pasa chavales, la vida es así! ¡Y la camiseta es preciosa!
Otra posibilidad es que le estén haciendo la cama a Simeone, pero no está el patio como para encima darle la espalda al entrenador. ¿Le harán la cama Felipe o Hermoso por los que nadie preguntó este verano para ficharlos? ¿Le harán la cama Morata o Saúl que se fueron porque el Cholo no les ponía dónde y cuándo querían, pero que han tenido que volver porque no tenían más opciones? ¿Se la harán Giménez y Savic a los que el Cholo ha protegido pese a sus continuas lesiones? ¿Se la harán Nahuel Molina o De Paul que están en el Atlético porque los pidió Simeone? ¿Se la hará Correa que siempre ha sido defendido por el Cholo incluso cuando ha estado mal? ¿Se la hará Carrasco que volvió corriendo desde China porque se equivocó al marcharse? ¿Se la hará Marcos Llorente que ha vivido su mejor temporada con él? No, en serio, ¿quién le hace la cama al Cholo? ¿Griezmann y Koke? ¿Witsel y Kondogbia? ¿Solo Joao? ¿Grbic? No creo, la verdad. Además es muy posible que sin el Cholo ahí, muchos de ellos ni siquiera estarían en ese vestuario.
En conclusión, que el Atlético, como dijo ayer Griezmann, debe "apretar el culo, callarse, trabajar y pelear y el que no quiera, FUERA". Culpable Simeone. Culpables los jugadores a los que, por cierto, estoy seguro de que el Cholo no les dijo ayer que no saliesen a dar las gracias a los miles de aficionados que se han gastado el dinero en Oporto, Brujas y Leverkusen. Solo salió Saúl. Y culpables los de arriba por su nula exigencia. Asumir esto y repartir culpas ayudará al Atlético. Una guerra civil eligiendo bando no arreglará nada.