
Este lunes, mi querido Juanma Rodríguez, comenzaba el programa con su habitual editorial. Trataba, en este caso, la situación del Real Madrid. Y no hubo palos, hubo un palo: a Xabi Alonso. Xabi Alonso por aquí, Xabi Alonso por allá… Xabi Alonso, culpable de ser primero en Liga y de estar entre los 8 mejores en la Champions. Xabi, pide perdón que no han gustado tus partidos a pesar, y esto ya lo digo yo, de los obstáculos que le están poniendo sus jugadores. Futbolistas que están en contra del entrenador, de la autoridad, y por lo tanto, en contra del Real Madrid y del escudo al que representan. Hoy vengo a hablarles de aquellos a los que Juanma no mencionó.
Hace un año, a estas alturas de la temporada, todos, salvo los más Ancelottistas, coincidíamos en el análisis del Real Madrid. Faltaba intensidad, un equipo sin alma al que no se le notaba la mano del entrenador... Sucedía bajo las órdenes del padre de los futbolistas, a quien querían una barbaridad, o eso decían porque luego no corrieron lo suficiente para salvarle, dejándole tirado. Un año más tarde, con otro entrenador, vuelve a suceder lo mismo. Tras dos meses donde se vislumbraba un Real Madrid distinto, más ordenado, con conceptos tácticos nuevos, el equipo vuelve a caerse. Falta intensidad, desconexiones, no se nota la mano del entrenador…
Si los problemas son los mismos que el año pasado, si se repite la misma historia, con un entrenador de mano izquierda y también ahora con uno más táctico, quizá el problema no esté en el banquillo, quizá esté en el denominador común, que son los futbolistas. ¿A ver si es que Ancelotti les dio la mano, le cogieron el brazo y ahora, como el niño que se ha acostumbrado a las vacaciones, no le gusta volver al colegio?
Hablemos de lo que hemos visto todos nosotros, con nuestros ojos. Como dijo Luis Herrero en Fútbol esRadio, en su vida, ha visto una cama más descarada. ¿Si algunos jugadores no corren, como vemos todos, es porque Xabi Alonso les pide que no corran? ¿Si los jugadores no ganan un duelo, es porque Xabi Alonso les pide que vayan blandos a la disputa? ¿Xabi Alonso entrena en Valdebebas una presión que se basa en detener a los rivales con la mirada? ¿Por qué no hablamos de lo que pasa en ese vestuario? ¿Qué tiene que pasar ahí dentro para que un futbolista, Vinicius Junior, se vea con el poder suficiente para desafiar al entrenador delante de todo el mundo por ser, simplemente, sustituido? ¿Por qué no hablamos de Fede Valverde, uno de los capitanes del Real Madrid? ¿Hablamos del mal ejemplo que da en ese vestuario? Un jugador que también desafió al entrenador negándose a calentar. Un futbolista que se ve también con el poder, la fuerza, para exigir no jugar en una posición porque no le gusta.
Entrenar así es imposible. Si Xabi Alonso les pone donde quieren los jugadores, es que entonces no tiene personalidad y pierde al vestuario. Si Xabi Alonso no les pone donde ellos quieren, pasa lo mismo porque se van a enfadar. Al final, haga lo que haga, está muerto. Si apuesta, como ha hecho, por poner a Rodrygo en la derecha y a Valverde en el lateral, esto se traduce, a través de filtraciones en este eufemismo: "los jugadores no comulgan con las ideas del entrenador".
Me encantaría que un futbolista explicara públicamente con qué ideas no comulga. ¿Qué ha pasado en estos 3 meses tan grave? Seguro que si lo hicieran ninguno saldría vivo del juicio popular. Dirían que les aburren los videos, que les cansan los análisis, que no les gusta que les corrijan conceptos tácticos… en otras palabras, no les gusta trabajar, no les gusta el fútbol que ahora domina Europa. Eso es el PSG con Luis Enrique, eso es el City de Guardiola, el Arsenal de Arteta o el Barcelona de Hansi Flick donde un jugador se queda en el banquillo por llegar tarde a una charla táctica. ¿Se imaginan a Xabi Alonso dejando en el banquillo a un jugador por llegar tarde o por no ver un vídeo? Imposible.
Y eso que Xabi Alonso no es Flick, Antonio Conte ni José Mourinho eh. Que parece que ha llegado Tom Highway, el sargento de hierro. En el Madrid, los jugadores, quieren competir contra los mejores, pero trabajando menos. Quieren sacar un diez, pero sin estudiar. ¿Imposible? No. Eso lo pueden hacer superdotados, pero en este vestuario hay mucho jugador que se cree algo que no es. Vinicius lleva el 7, pero no es Cristiano, Valverde lleva el 8, pero no es Kroos… ¿Saben cuándo se terminó, que no empezó, a romperse el vestuario? En el clásico. ¿Y saben quién es el culpable? No es Vinicius, no. Es Florentino Pérez cuando se puso de lado desautorizando a Xabi Alonso. Ahí los jugadores huelen la sangre.
¿Por qué en años anteriores, cuando otros futbolistas echaron un pulso al entrenador, todos, incluyendo Florentino Pérez, entendimos que esos jugadores no tenían razón? Y hablo de jugadores como Sergio Ramos, Iker Casillas o Cristiano Ronaldo. ¿Por qué este año no se ve igual? Para que vean que soy sincero, a esta pregunta no tengo respuesta. Creo, en el caso de Florentino Pérez, porque él no confía tanto en Xabi Alonso y porque está más pendiente del nuevo estadio, de la Superliga y de cambiar la sociedad del club… pero, desde mi humilde punto de vista, si Xabi Alonso, como creo que va a pasar, es arrastrado por los jugadores y es destituido, el problema que existe en el Real Madrid se va a agravar y tendremos a los nuevos galácticos, a los nuevos dueños del club. ¿Quién debería ser el siguiente entrenador? Florentino Pérez ya sabe la respuesta. Debe preguntar a Vinicius, Valverde y compañía.
