
Además de las víctimas mortales, al menos doce personas resultaron heridas, entre ellas algunas de gravedad que tuvieron que ser trasladadas de urgencia en helicópteros a los hospitales de la zona.
Según los testimonios del suceso, dijo Oliva, el chófer del autobús accidentado "iba jugando a carreritas" con un colega que conducía otro vehículo de la empresa de transporte de pasajeros cuando se produjo el siniestro.
El tren, que no hacía parada en Cuautitlán y que se dirigía a una localidad cercana denominada Apaxco, chocó contra el autobús y lo arrastró unos ochenta metros. La cifra de muertos fue confirmada también a Efe por el jefe regional de la policía del Estado de México, Felipe Rodríguez, que agregó que el número de heridos asciende a más de una decena.
Personal de rescate participa en la evacuación de los cuerpos y en la búsqueda de posibles nuevas víctimas entre el amasijo de hierros retorcidos del vehículo accidentado.
