(Libertad Digital) “Se necesitan 1.500.000 euros y sólo llegaron 100.000”, dijo en Buenos Aires López Morales, también director del Diccionario de Americanismos, aunque apostilló que “el mundo hispánico está acostumbrado a la improvisación. El planteamiento surgió a raíz de la presentación formal de este diccionario en el III Congreso de la Lengua y que contará con unas 100.000 acepciones de palabras de uso frecuente en Hispanoamérica que no existen en España.
Posteriormente, el director de la RAE, Víctor de la Concha; el del Cervantes, César Antonio Molina; y la subsecretaria de Cultura de Argentina y presidenta de la Comisión Ejecutiva para el Congreso, Magdalena Faillace, hicieron público un comunicado en el que se aseguraba que “se dispone de todos los recursos necesarios ”para que este encuentro cultural se desarrolle de acuerdo con el programa hecho público”. Los temores de López Morales “carecen de fundamento”, según el comunicado.
Magadalena Faillace aseguró que la financiación del congreso “está garantizada” y que su costo, de 1,5 millones de euros, “está decididamente cubierto y hasta es posible que sea superado”.
Bajo el lema “Identidad lingüística y globalización”, el III Congreso Internacional de la Lengua se realizará del 17 al 20 de noviembre próximo en Rosario, en la provincia de Santa Fe, a unos 350 kilómetros al norte de Buenos Aires.
Empresas que lo financiarán
“López Morales va a tener la felicidad de presentar su diccionario en el Congreso, tal cual estaba previsto”, dijo Faillace, quien confirmó que la cita cuenta con los aportes de un grupo de empresas argentinas y españolas, como Aeropuertos Argentina 2000 –que correrá con los gastos de los billetes de los 160 invitados-; Endesa; Techint –que según el diario argentino La Nación aportará 300.000 pesos, unos 100.000 euros-; Autopistas del Sol; Mapfre –que aportará los 160 seguros de vida de los participantes-; y la Bolsa de Comercio de Rosario.
“Además, existe el compromiso en vías de formalizarse de otro grupo de empresas e instituciones entre las cuales se encuentra Repsol, Grupo Santander Central Hispano, Banco Río y el Ministerio de Cultura de España”, que se comprometió a enviar 60.000 euros, afirmó la funcionaria argentina. La Comisión Ejecutiva también señaló que empresarios de Santa Fe han hecho un aporte de 2,5 millones de pesos (689.845 euros), que garantizarán el acondicionamiento del Teatro Círculo de Rosario, donde tendrá lugar la inauguración, que contará con la presencia de los Reyes de España y las máximas autoridades argentinas.
Sin embargo, la polémica no he terminado en Argentina. Según informaciones aparecidas en diferentes medios de comunicación de este país, Faillace ha denunciado “una campaña en contra del Congreso que pone de relieve la falta de vocación para construir de algunos sectores”, concretado según un portavoz de Cultura en “las Academias de las Letras, que actúan como una corporación”. El alcalde de Rosario, Miguel Lifschitz, por su parte, dijo que la polémica se debe a “sectores que tienen celos porque no se realiza en Buenos Aires”. El 1,5 millón de euros que requiere la organización del congreso es una cifra “que no puede asustar a nadie, ni siquiera al municipio de Rosario", dijo.
Tensión entre ambas orillas del Atlántico
El congreso ha estado envuelto en la polémica desde que se presentó, y en los diarios porteños se cuestiona a un sector de la organización y a los representantes del Gobierno, al que se acusa de parecer “más interesado en servir a consignas político-ideológicas que a cuidar los aspectos más estrictamente académicos del encuentro”. También se critica la alta representación de la provincia donde se celebra “en detrimento de intelectuales argentinos cuya ideología personal no resulta grata al pensamiento político del actual Gobierno”, según la agencia de noticias de Santa Fe DERF.