LD (EFE) La chica había sido trasladada a un hospital de la ciudad de Viedma, a unos mil kilómetros al sur de Buenos Aires, y estaba siendo sometida a una operación cuando se produjo su fallecimiento, informaron autoridades educativas de la provincia de Buenos Aires.
El hecho se produjo este martes en una escuela de la localidad de Carmen de Patagones, donde un alumno que había concurrido con el arma reglamentaria de su padre abrió fuego contra sus compañeros de clase y tres de ellos murieron en el acto por los disparos.
Esas víctimas fueron identificadas por la policía como Sandra Nuñez, Evangelina Miranda y Federico Ponce, que tenían entre 15 y 16 años y eran alumnos de la escuela media "Islas Malvinas" de la apacible población del sur de la provincia de Buenos Aires. En tanto, fuentes del hospital local informaron de que permanecen internados otros cinco adolescentes, de los cuales dos están graves, otros dos se encuentran en estado "reservado" y el restante "fuera de peligro".
Según testimonios de profesores y alumnos de la escuela recogidos por medios de prensa de la zona, el agresor es hijo de un suboficial de la Prefectura Naval (guardacostas) y además de llevar la pistola nueve milímetros de su padre portaba un arma blanca. Al parecer, el adolescente se reunió con sus compañeros en el patio principal del edificio para izar la bandera argentina y cuando los alumnos se dirigieron a las aulas sacó la pistola y comenzó a disparar.
Sus compañeros definieron al chico de 15 años, llamado Rafael, como "demasiado tranquilo" y dijeron que actuó "en estado de shock" y sin pronunciar palabra tanto antes como después de vaciar los trece proyectiles que había en el cargador de la pistola. Se trata de un hecho inédito en Argentina y que conmocionó a la población de Carmen de Patagones, de donde el autor de la matanza fue trasladado por la policía a otra ciudad para evitar agresiones de familiares y amigos de las víctimas.
El hecho se produjo este martes en una escuela de la localidad de Carmen de Patagones, donde un alumno que había concurrido con el arma reglamentaria de su padre abrió fuego contra sus compañeros de clase y tres de ellos murieron en el acto por los disparos.
Esas víctimas fueron identificadas por la policía como Sandra Nuñez, Evangelina Miranda y Federico Ponce, que tenían entre 15 y 16 años y eran alumnos de la escuela media "Islas Malvinas" de la apacible población del sur de la provincia de Buenos Aires. En tanto, fuentes del hospital local informaron de que permanecen internados otros cinco adolescentes, de los cuales dos están graves, otros dos se encuentran en estado "reservado" y el restante "fuera de peligro".
Según testimonios de profesores y alumnos de la escuela recogidos por medios de prensa de la zona, el agresor es hijo de un suboficial de la Prefectura Naval (guardacostas) y además de llevar la pistola nueve milímetros de su padre portaba un arma blanca. Al parecer, el adolescente se reunió con sus compañeros en el patio principal del edificio para izar la bandera argentina y cuando los alumnos se dirigieron a las aulas sacó la pistola y comenzó a disparar.
Sus compañeros definieron al chico de 15 años, llamado Rafael, como "demasiado tranquilo" y dijeron que actuó "en estado de shock" y sin pronunciar palabra tanto antes como después de vaciar los trece proyectiles que había en el cargador de la pistola. Se trata de un hecho inédito en Argentina y que conmocionó a la población de Carmen de Patagones, de donde el autor de la matanza fue trasladado por la policía a otra ciudad para evitar agresiones de familiares y amigos de las víctimas.
