Las policías portuguesa y alemana buscan nuevas pistas que permitan localizar el cadáver de Madeleine McCann —la menor británica de 3 años que despareció en el Algarve, en 2007— y/o acusar formalmente al principal sospechoso de su asesinato —el depredador sexual Christian Brueckner, que cumple condena por la violación de una anciana en la misma zona en 2005— y así evitar que salga de la cárcel en septiembre (como está previsto).
El "amplio conjunto de diligencias", como lo definió la Policía Judicial (PJ) de Portugal en el comunicado con el que confirmó la existencia de nuevas pesquisas, se llevan a cabo estos días en un descampado ubicado en el municipio de Lagos, al que pertenece Praia da Luz (localidad en la que la pequeña habría sido raptada mientras dormía), en el que hay varios edificios abandonados que podrían ser clave para la resolución del caso.
Según informa el diario The Sun, los investigadores localizaron una imagen vía satélite tomada el 22 junio de 2007 (siete semanas después del secuestro de Maddie) en la que aparecería una pequeña carpa blanca dentro una de las casas abandonadas en las que los agentes del caso ubican al sospechoso. Una fuente policial citada por el diario asegura que "Brueckner solía acampar aquí". De ahí que se esté peinando la zona, unas cinco hectáreas de matorrales y maleza, con motosierras y hasta una retroexcavadora.
El área en la que buscan es un punto estratégico entre la antigua casa de Brueckner y el complejo de apartamentos Ocean Club de Praia da Luz, del que se llevaron a Madeleine. Una vez se toma alguno de los desvíos del sendero principal, se entra en una zona de monte solitaria donde el tránsito de turistas es muy ocasional y parece fácil perderse (u ocultarse, dado el gran número de casas abandonadas que podemos encontrar en ella).
Búsqueda in extremis
Cabe recordar que el reo alemán —de 48 años en la actualidad— fue declarado como el principal sospechoso del secuestro y asesinato de la de la niña británica en 2020, pero no ha sido acusado formalmente de estos hechos. De ahí la importancia de estas nuevas actuaciones iniciadas por la policía portuguesa, a petición de la germana. Necesitan recabar pruebas suficientes que les permitan mantener a Brueckner en prisión, una vez que cumpla su última condena el próximo mes de septiembre.
Hace dos semanas conocíamos que la policía germana tiene en su poder un disco duro del principal sospechoso de la desaparición cuyo contenido podría ver la luz próximamente y conmocionar al mundo. Así lo asegura el periodista británico que ha liderado la investigación realizada por The Sun, que informaba en exclusiva del hallazgo de nuevas pruebas de relevancia contra Brueckner. Según Ron Pattinson, "el mundo debe prepararse" para conocer el material de ese dispositivo de almacenamiento portátil. "Algo mucho peor por venir".
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