El Juzgado de Primera Instancia de Briviesca ha determinado que las exreligiosas conocidas como las cismáticas de Belorado deben desalojar el Monasterio de Nuestra Señora de Bretonera en Burgos en el que permanecen a pesar de que decidieron romper con Roma —como ellas mismas anunciaron el 13 de mayo de 2024 y ratificaron posteriormente— y en consecuencia fueron excomulgadas y expulsadas de la vida consagrada el 22 de junio de 2014.
La sentencia, que ha sido comunicada este jueves a las partes, estima en su totalidad la demanda de desahucio presentada el 16 de septiembre de 2024 por el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, en calidad de comisario pontificio. La Santa Sede realizó su nombramiento para gestionar la crisis cismática y proteger el patrimonio adscrito a la orden de las monjas clarisas, bloqueando cualquier pretensión de la entonces abadesa de cambiar de titularidad inmuebles y/o terrenos.
No pudieron evitar, sin embargo, que vendieran artículos que se encontraban en el interior del monasterio a través de distintas plataformas en internet. En cualquier caso, las ocho exmonjas que se resistían hasta ahora a abandonar el cenobio burgalés deberán hacer entrega del monasterio a la parte demandante, porque el tribunal ha sentenciado que ha lugar al desahucio.
"Condeno a la parte demandada a que desaloje, deje libre y expedita y a disposición de la parte actora la referida finca, con apercibimiento de lanzamiento si no lo hiciere voluntariamente", advierte el auto que ha llegado sólo dos días después de la celebración del juicio. Fue el pasado martes cuando se celebró la vista oral a la que las cismáticas llegaron ataviadas con sus hábitos de monjas y arremetiendo contra el arzobispo.
Entre los argumentos del tribunal, la sentencia señala que "la parte demandada no ha demostrado, como así le competía, que reúna título alguno que justifique y legitime el uso del inmueble frente a su titular, lo que debe conducir a la estimación de la demanda en su integridad" mientras que la parte demandante sí ha adjuntado la certificación del Registro de la Propiedad y el certificado catastral que avala la pretensión de su demanda.
¿Se marcharán voluntariamente?
Una de las cuestiones que hay sobre la mesa es si las cismáticas abandonarán voluntariamente el inmueble. La fecha de lanzamiento está prevista para el 12 de septiembre, pero fuentes eclesiales cercanas al caso consultadas por Libertad Digital desconfían en que las exreligiosas "se vayan a ir y sea tan fácil".
Si se marchan, está por ver dónde se establecen. Antes de entrar a la vista del martes, aseguraron que aun no lo sabían. Aparentemente, una de las opciones más sencillas sería que todas se fuesen a Asturias, donde abrieron su "restaurante de clausura". Pero se rumorea que podrían estar planeando mudarse al Monasterio de Orduña, el cenobio que compraron pero no pagaron.