
El Departamento de Policía de Vallejo (California) ha confirmado el hallazgo del cadáver de Renia Lewis, una joven de 28 años que fue reportada como desaparecida el pasado domingo 28 de septiembre, oculto en una vivienda unifamiliar de esta ciudad del condado de Solano. Ese mismo día, explican a través de un comunicado, la investigación condujo a los agentes al domicilio en el que han encontrado los restos de la mujer, que era residente de Berkeley (en el condado de Alameda).
"Había indicios de que la mujer desaparecida pudo haber estado dentro de la residencia en algún momento antes de desaparecer", señalan en el texto. Sin embargo, esa primera visita —en la que realizaron lo que denominan una comprobación de bienestar y un registro superficial de las distintas estancias y los lugares en los que una persona pudiera esconderse— resultó infructuosa.
La búsqueda pasó entonces a la División de Detectives del Departamento de Policía de Vallejo, que además solicitó la ayuda del FBI. El pasado martes, 30 de septiembre, los investigadores regresaron al domicilio con una orden de registro para una revisión exhaustiva del inmueble y descubrieron que hay una entrada oculta que va al ático en un cobertizo que hay en el patio trasero. Allí localizaron los restos de una mujer fallecida que posteriormente ha sido identificada como Renia Lewis.
En la residencia encontraron información que les llevó a identificar a Douglas Irwin Shaw, de 41 años, como sospechoso de la muerte de la mujer. Según 7News, él vivía en esa pequeña casa ubicada en el patio trasero de la vivienda, que —aseguran los vecinos— llevaba tiempo tapiada. El varón fue arrestado sin incidentes en su lugar de trabajo y una vez en comisaría admitió su responsabilidad en el "atroz crimen" ante los agentes.
Shaw ha sido ingresado —sin derecho a fianza— en la cárcel del condado de Solano acusado de asesinato. "Fue un acto de violencia desgarrador y sin sentido que no tiene cabida en nuestra comunidad", señala el jefe de policía de Vallejo —Jason Ta— en el comunicado de prensa. "Estoy orgulloso de nuestros oficiales y detectives por realizar un arresto y resolver este caso", añade. "Nuestros pensamientos están con la familia de la fallecida en estos momentos increíblemente difíciles".
Oculto en el cobertizo
Medios estadounidenses como KTVU —de FOX— detallan que el cuerpo de la joven fue desmembrado y escondido detrás de la pared de una especie de estancia secreta, que hay en el hueco del ático del cobertizo ubicado en el patio trasero, a la que se accede a través de una "entrada oculta" —extremo confirmado por la policía—.
Según la información ofrecida por este medio, habría sido la madre de la víctima —Ruth Lewis— quien habría llevado a los agentes hasta la residencia en la que se han encontrado sus restos. Un inmueble con el que Renia no tendría ninguna conexión. Aunque era habitual que visitara la ciudad, donde tenía familiares y amigos.
Su madre habría localizado la casa rastreando la señal de su hija con la aplicación para móviles Life 360, que permite a los componentes de un grupo de personas —normalmente familiares— compartir con el resto su ubicación en tiempo real, iniciar un chat e incluso enviarles una alerta de seguridad.
Desmembró su cuerpo
Con la información que tienen hasta el momento, los investigadores creen que el sospechoso mató a la joven poco después de llevarla a su residencia, en la calle 14 de Vallejo, el pasado viernes 26 de septiembre —el día en el que Renia fue vista por última vez y dejó de responder al teléfono—.
Cuando Ruth supo el sábado que su hija tampoco se había puesto en contacto con su mejor amiga, su preocupación aumentó e inició su búsqueda. El rastreo de su móvil la llevó hasta una dirección desconocida. Cuando llegó, le pareció que en la casa —sucia y posiblemente habitada por okupas— no había nadie.
Mientras familiares y amigos hacían batidas en busca de pistas, ella y su marido —asegura— habrían estado recibiendo llamadas y mensajes de un número de otro estado haciéndose pasar por su hija. Cuando ella llamó a ese teléfono, nadie contestó. Solo escuchó ruidos. En cualquier caso, a esas alturas Renia ya estaba muerta.
Aunque la policía no ha confirmado públicamente el desmembramiento del cadáver, sí ha informado a la familia de este extremo. Así lo habría confirmado la propia Ruth, recoge San Francisco Chronicle. "Es un monstruo. Es un monstruo", ha exclamado la mujer. "Cortó a mi bebé".

