Destinados en el pelotón cinológico del Segundo Batallón de la UME (Unidad Militar de Emergencias) en la base aérea de Morón de la Frontera, en Sevilla, este binomio es conocido por su especialización en la localización de personas fallecidas. Este jueves, Baladrón y Choni se trasladaron a la cantera de Calicanto en Chiva, en Valencia, una zona gravemente afectada por la reciente DANA que ha azotado el este de España.
Subidos en una embarcación neumática, padre e hija del alma, como así se conocen a los equipos caninos, peinaron la zona inundada en busca de posibles víctimas. A pesar de su esfuerzo y precisión, no encontraron ningún cuerpo, pero su trabajo formó parte del dispositivo de rescate que ha estado buscando desaparecidos tras las devastadoras lluvias. La misión, aunque no dio resultados, forma parte del imparable compromiso de estos héroes anónimos.
Choni, una pastor belga malinois, es una de las perras más destacadas de la UME, especializada en la localización de restos humanos enterrados o sumergidos. "Cuando empieza la descomposición del cuerpo, se liberan aceites y grasas que Choni detecta con su olfato", explica el cabo Baladrón, quien trabaja codo con codo con su compañera en cada misión. "Estos fluidos suben a la superficie, y ella, con su hocico, se acerca lo máximo posible al agua para olerlos", añade. La capacidad olfativa de Choni es tan precisa que puede detectar un cuerpo sumergido a una profundidad de hasta 14 metros.
En caso de que detecte un olor que indique la presencia de un cuerpo, Choni avisa a su guía con un ladrido, lo que permite a los buzos delimitar rápidamente la zona de trabajo para realizar el rescate. Esta capacidad de trabajo en equipo, entre humanos y perros, ha sido fundamental en la recuperación de víctimas en situaciones extremas, como terremotos y catástrofes naturales.
Choni comenzó su carrera en la UME en febrero del año pasado, participando en la búsqueda de desaparecidos tras el terremoto en Turquía, donde destacó por su rapidez y efectividad. Por su labor incansable, la perra fue galardonada como "perra destacada" en reconocimiento a su valentía y destreza. No es solo una heroína de cuatro patas, sino una soldado de élite que ha salvado vidas y ha ofrecido consuelo en momentos de desesperación.
Su entrenamiento es riguroso y diario. Los binomios de la UME, como Baladrón y Choni, realizan simulacros constantes bajo una disciplina férrea para mantener su nivel de preparación en situaciones de emergencia. Gracias a su dedicación, tanto humana como animal, el equipo de la UME está siempre listo para intervenir en las zonas más afectadas por desastres, llevando esperanza y resultados concretos en las situaciones más desesperadas.
En este tipo de misiones, donde el tiempo es vital, la coordinación y el trabajo en equipo entre los rescatistas humanos y caninos es fundamental. La contribución de Choni y otros perros de la UME es esencial para localizar a posibles víctimas en zonas de difícil acceso, como las aguas de la cantera de Calicanto, siempre con la esperanza de que, en la próxima misión, su olfato logre dar con el rastro de alguien que aún necesita ser encontrado.