Miércoles 11 de Agosto
Actualizado a las 21:55:28
LD

Libertad Digital: Noticias y opinión en la Red

Comentarios

La economía española empeorará en el segundo semestre de 2010

La actual situación de la economía española recibe una valoración "particularmente pobre" en la última encuesta sobre confianza económica mundial elaborado por el instituto alemán de investigaciones económicas Ifo y la Cámara de Comercio Internacional (CCI). (Volver)

« 1 »
ignalade dijo el día 11 de Agosto de 2010 a las 19:50:17:
Velneva, como siempre atinado, certero y admirable.
No me queda más que sumarme a su comentario, añadiendo que ese por desgracia no es el interés de la mayoría del país, aquí de lo que se trata es de no pensar, ya vendrá quien nos saque las castañas del fuego... aquí de lo que se trata es de ser lo más diferente posible al resto, lo más NAZI y separatista que se pueda ser o más, de hundir el futuro de regiones usando la lengua local como arma de crear corral y disuadir inversiones, como forma de aborregamiento generalizado, de separar nunca de unir, del pan para hoy y el hambre para mañana...
Me temo amigo, que haría falta un auténtico milagro divino para salir de la que estamos, pastoreados por psicópatas a los que la vileza les asfixia, sin alternativa creíble además a éstos y con la masa del ganado, en pleno espectáculo del circo romano siglo XXI...
Un abrazo.
Montesin dijo el día 11 de Agosto de 2010 a las 19:25:51:
La noticia es mentira, que lo dijo la Salgado. Que pagando más IVA ibamos a vivir mejor, habría más negocio y la economía saldría reforzada.

No me dirán que no se creen lo que dijo Doña Elenita verdad?

Por cierto, muy bueno el comentario de Francisco Velasco. A ver si los españoles que votan a este impresentable toman nota. Porque Zapatero ni se inmutará. A ver quien es el guapo que le dice a este indigente intelectual que a base de ideología no se ganan los mercados ni se recupera economicamente una nación.
velneva dijo el día 11 de Agosto de 2010 a las 18:32:16:
Francisco Velasco escribe: LA PROCESIÓN

Un Gobierno que se precie, presidente Zapatero, debe considerar prioritaria la tríada conceptual formada por la innovación, la productividad y la competitividad.

Que el gran cáncer de nuestra economía es la escasa competitividad nadie con dos dedos de frente lo pone en duda. Que de la crisis sólo se sale potenciando la competitividad, ningún economista disiente. Que el paro es una manifestación, muy dolorosa, de la crisis, pero no su causa, es de común consenso. Que la competencia no es lo mismo que la competitividad, es de perogrullo, por más que se hallen estrechamente interrelacionadas.

La economía española es un globo desinflado. El frenazo turístico -no olvidemos el peso del turismo en la economía española desde los años sesenta del pasado siglo XX- nos debe hacer reflexionar. Y en esta reflexión, habremos de inferir que el extranjero y el nacional no buscan sólo el ocio de sol y playa, ni el hotelucho de tres al cuarto, ni el paseíto por la orilla del mar, ni la sesión de cine nocturno en un recinto al aire libre. No. El turista busca un servicio diferente, lejos de lo banal, caro pero que satisfaga y distinga, que ajuste el coste a los precios, que la oferta deslumbre a la demanda.

El término investigación se acopla al de desarrollo y ambos cierran filas en torno a la idea de innovación. Sólo el muy buen paño sigue vendiéndose en el arca, pero incluso la mejor obra de arte precisa caminos innovadores para espolear el mercado. Los productos nuevos se introducen -y permanecen- en el mercado cuando comportan una mejora sustancial. El turismo de golf y de spa marca unas nuevas pautas en el sector de la hostelería. ¿Podemos afirmar, sin embargo, que el nuestro es un país innovador? El Banco de España avisa de nuestro defícitario caudal tecnológico y humano.

La competitividad comporta capacidad organizativa la cual trae consigo ventajas comparativas que, a su vez, permitan mejoras en el entorno social y económico. La capacidad organizativa es inherente a la estrategia de negocios. Las ventajas comparativas se acompañan de recursos y habilidades respecto a los competidores a quienes se pretende relegar o adelantar. Las mejoras sociales y económicas llevan aparejada una sostenibilidad que permita arrinconar productos que son flor de un día. Es decir, se trata de prever la competitividad futura y ésta sólo será posible cuando se generen nuevos nichos de mercado y cuando se lancen con éxito nuevas ideas, nuevos productos y nuevos servicios. La competitividad exige, pues, calidad constante e innovación sistemática. La calidad competitiva se vincula a la productividad y ésta es el fruto de una inversión fuerte en capital pero también en recursos humanos.

La economía española, Zapatero, precisa algo más que estímulos o alientos. Estamos sumidos en la demagogia del PER y del subsidio generalizado. Puede que, de esta manera, se aseguren votos. Sin embargo, es seguro que, así, el país recuperará niveles de pobreza como jamás quisiéramos recordar.

El estado español, presidente Zapatero, no es una suma federal. Es una unidad. Su fortaleza depende de su estabilidad política, pero también de la idea de comunidad, de cooperación, de responsabilidad entre los distintos pueblos de nuestra España. Cantones primo-republicanos, no.

Aprenda, presidente. No pase a la historia peor parado de lo que ya está. Hace tres años, los santos del paso eran paseados por millones de españoles que trabajaban. Hoy, ese paso pesa cuatro millones largos de desempleados más. Los que soportan el peso, son cuatro millones larguísimos menos. A ver quién es el guapo que sostiene esa carga. Sobre todo si el capataz no distingue entre una chicotá y una charlotá.

Un saludo.
« 1 »

Comente esta noticia

Lo más popular

Copyright Libertad Digital S.A.
C/ Juan Esplandiú, 13
28007 Madrid
Tel: 91 409 4766
Fax: 91 409 4899