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SALE EN DEFENSA DE LOS INTERESES DE CATALUÑA

Montilla vuelve a presionar para que la reforma de la financiación vaya en paralelo a la estatutaria

Poco días después de que el equipo de Zapatero llegara al Gobierno, los ministros de Industria y Administraciones Públicas se enzarzaron en una polémica por el calendario de la reforma de financiación autonómica. Frente a las prisas de Montilla, el ministro Sevilla optaba por no forzar los plazos. Ahora el responsable de Industria vuelve a exigir que los cambios en la financiación se hagan al tiempo que los estatutarios. Advierte también de que Cataluña puede sentirse discriminada si recibe menos que otras CCAA.

Poco días después de que el equipo de Zapatero llegara al Gobierno, los ministros de Industria y Administraciones Públicas se enzarzaron en una polémica por el calendario de la reforma de financiación autonómica. Frente a las prisas de Montilla, el ministro Sevilla optaba por no forzar los plazos. Ahora el responsable de Industria vuelve a exigir que los cambios en la financiación se hagan al tiempo que los estatutarios. Advierte también de que Cataluña puede sentirse discriminada si recibe menos que otras CCAA.
L D (Agencias) Primero respaldó a Maragall en sus reivindicaciones nacionalistas y ahora vuelve a enfrentarse a Jordi Sevilla, partidario de no forzar los plazos en la negociación para reformar el sistema de financiación autonómica. El ministro Montilla, que representa la cuota del PSC en el Gobierno de Zapatero, ha vuelto a salir en defensa de los intereses de Cataluña. Advierte, en declaraciones a Europa Press, de que los catalanes son los que pueden sentirse "discriminados" si reciben menos por habitante que otras Comunidades Autónomas en el reparto de la financiación autonómica para cuestiones como Educación o Sanidad.
 
Al ser preguntado si no teme que al aplicar el principio de aportar por renta y recibir por población, las CCAA menos pobladas pueden sentirse discriminadas, el secretario general del PSC aseguró que éste "es un principio general", pero luego, dijo, "debe tener unos principios correctores, por supuesto".
 
El ministro vuelve a poner sobre la mesa la reforma de la financiación autonómica después de la advertencia de Carod, que dijo que ERC podía “perder la paciencia”. Ahora Montilla insiste en que la reforma tiene que realizarse a la vez que la de los estatutos, dos procesos —explica— que "han de hacerse en paralelo". A su juicio, sería "deseable" que los cambios pudieran cerrarse en esta legislatura: "por supuesto, cuando se inicia algo, lo que se quiere es acabar lo antes posible, pero yo no soy un ingenuo, sé que es un proceso tremendamente complejo y no hay que ser predeterminista al respecto".

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