Surgen los primeros problemas en el divorcio de Ana María Aldón y Ortega Cano. La separación, inicialmente consensuada, se ha encontrado sin embargo con algunos impedimentos que están frenando la firma de unos papeles que iba a ser aparentemente rápida.
Ambos están de acuerdo en que la prioridad es su hijo. Según la colaboradora Paloma García-Pelayo, hubo un primer acuerdo verbal hace ya algún tiempo que sin embargo no se acaba de materializar.
Todo sucedió en una reunión que tuvo lugar en el domicilio del matrimonio, y "en principio estaba todo consensuado", dijo en El Programa de AR.
En este preacuerdo "ella no pedía nada, todo lo que quiere tiene que ver con la manutención del menor". De modo que el asunto tiene que ver más con terceras personas de la familia de Ortega Cano.
"Desde el entorno le preguntan que por qué tiene que pagar esa cantidad y por qué tiene que correr con la custodia del menor si en principio va a ser compartida", dijo García-Pelayo sobre la petición de esta tercera parte.
Nada tiene que ver, por tanto, con los gastos de la propia Ana María ni con sufragar su nueva vivienda, sino con el dinero relativo al hijo en común. Pero sí está claro que un miembro de la familia de Ortega, cuya identidad no ha trascendido, está poniendo en riesgo los puntos del acuerdo entre el torero y la diseñadora.
"El acuerdo fundamentalmente es pasar una cantidad entorno a mil euros, pagar los gastos escolares, los médicos...la manutención del menor". Que no se haya firmado esta propuesta "hace dudar de que finalmente se haga".