La amistad de Paloma Cuevas y el cantante Luis Miguel sigue viento en popa en Madrid. Amistad, o algo más, pues no falta quien afirma con fuerza que entre ambos amigos ha surgido -por mucho que su entorno lo niegue- la chispa del amor.
Cuando el rio suena agua lleva. Solo así se explica que incluso la revista ¡Hola! haya publicado a lo largo del fin de semana de Navidad el último encuentro público de la pareja: de compras en un centro comercial en horario nocturno y para ellos solos.
Tal y como relata la publicación, ambos acudieron a un conocido centro comercial madrileño en plena Milla de Oro, en la calle Serrano, no en el horario habitual sino después de cierre. De ese modo y de manera íntima, Paloma Cuevas y Luis Miguel acometieron sus compras navideñas durante nada menos que cuatro horas.
En solitario y de nueve de la noche a la una de la madrugada, los dos amigos, de quien se ha asegurado que viven un apasionado romance, hicieron sus compras sin que ningún fotógrafo los molestase. Tal y como se desveló en El Programa de AR, los dependientes dijeron que estuvieron muy cómodos durante toda su estancia.
Marisa Martín Blázquez lo tiene claro, y en el magazine de Telecinco expuso que "Luis Miguel ha establecido residencia en Madrid y se traslada desde aquí si tiene compromisos fuera". La comunicación entre ambos, por tanto, estaría a tiro de piedra.
Una noticia que subraya que la española y el mexicano se ven con mucha frecuencia, y que tras sus respectivas separaciones -ella de Enrique Ponce, él de Araceli Arámbula- ambos han estrechado lazos de manera inapelable. El cantante, de hecho podría haber visitado la casa de Paloma el día de Nochebuena, manteniendo un excelente trato con los padres de ella.