
El régimen comunista de China ha oficializado este viernes la entrada en servicio de su tercer portaaviones, el Fujian. La ceremonia de entrega de bandera fue presidida por el propio Xi Jinping en la base naval de la isla de Hainan, un gesto que subraya la importancia estratégica de este nuevo buque para Pekín.
La principal novedad del Fujian es su sistema de catapultas electromagnéticas, una tecnología que hasta ahora solo poseía Estados Unidos y que permite lanzar aeronaves más pesadas y con mayor rapidez. Sin embargo, el Pentágono está reevaluando su uso en sus propios buques por su alto coste y las dificultades que presenta su mantenimiento y reparación en alta mar.
Aircraft Carrier Fujian, Commissioned!
— China Military Bugle (@ChinaMilBugle) November 7, 2025
China's PLANS Fujian (Hull 18), the first catapult-assisted aircraft carrier, was officially commissioned on Nov. 5, 2025. With a full-load displacement of over 80,000 metric tons and electromagnetic catapult launch and recovery… pic.twitter.com/LjWAGB2GTH
Diseñado y construido íntegramente en China, el Fujian fue botado en junio de 2022. Tras realizar sus primeras pruebas de navegación en mayo de 2024, en septiembre atravesó el estrecho de Taiwán para realizar ensayos y entrenamientos en el mar de China Meridional, un movimiento seguido con máxima atención por Taipéi y sus aliados.
Con un desplazamiento de más de 80.000 toneladas, el Fujian es un paso decisivo en los planes de Pekín para contar con seis portaaviones para 2035. Este rearme naval aumenta la tensión en la región, especialmente en lo relativo a los conflictos territoriales en el mar de la China Meridional y a la creciente amenaza sobre la soberanía de Taiwán, desafiando la hegemonía de Estados Unidos en el Pacífico.
