El técnico valencianista se ha mostrado ambicioso y ha asegurado que "afrontamos cada partido como una final. Los puntos ya no se van a volver a jugar. Tenemos que buscar los tres puntos con ahínco". Eso sí, ha vuelto a recalcar los problemas del equipo. "Fuera de casa tenemos que mejorar ostensiblemente el bagaje de la temporada pasada. Tenemos que encontrar la identidad y ser un equipo fuerte y sólido. Vamos a ponernos el objetivo de acabar con la portería a cero", ha señalado.
Cuestionado por los malos resultados del equipo santanderino en su feudo, Emery ha restado importancia a ese hecho y ha señalado que "nos vamos a enfrentar a un equipo que nos va a exigir mucha intensidad, nos van a apretar. Es un partido difícil, además por las dos derrotas que han tenido".
"Afrontarán el partido, antes del parón, como una final. Nosotros lo haremos igual. Debemos ser inteligentes, tener equilibrio y explotar nuestras armas. Yo no firmo ningún empate nunca. La idea es salir a ganar siempre", ha recalcado.
Ante la ausencia de Rubén Baraja, pese a haber recibido el alta medica hace un par de semana, Emery ha explicado que "todavía debe acumular entrenamientos. Sigue su evolución. Dejar gente fuera de la lista es una tarea ingrata pero hay que hacerla".
Por último, el entrenador valencianista ha recordado la importante victoria conseguida la pasada campaña en El Sardinero por su equipo. "Llegamos en una situación mala y allí fue el resurgir. Eso sí, Santander es, de por sí, una plaza difícil", ha concluido.