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Benítez, de pesado a meticuloso

La imagen del entrenador en el vestuario está cambiando a medida que pasan los días.

La imagen del entrenador en el vestuario está cambiando a medida que pasan los días.
Benítez junto a Arbeloa | realmadrid.com

En un club como el Real Madrid, en casi cuatro meses, puede pasar absolutamente de todo. Ese es el tiempo que lleva Rafa Benítez en el equipo blanco desde que le presentaran en el Bernabéu entre lágrimas provocadas por la emoción.

Desde entonces, han cambiado muchas cosas en el equipo. Entre ellas, la imagen que tienen de Rafa Benítez los jugadores del Real Madrid. Este miércoles disputan la quinta jornada de liga pero sabiendo ese cambio de pensamiento, da la impresión de que lleven más partidos disputados. Rafa ha pasado de ser casi un pesado, a ser un entrenador valorado por su pasión por la táctica y ser un perfeccionista del fútbol.

Cuando comenzó la pretemporada del Real Madrid, los entrenamientos no tenían el ritmo habitual. Benítez empleaba ejercicios variados, ensayaba con ejercicios tácticos, algo que se había desterrado casi en los últimos años y sobre todo, Benítez interrumpía el entrenamiento constantemente para corregir. Muchos jugadores no acababan de acostumbrarse a estos cambios en el día a día sobre el terreno de juego y fuera de él.

Como ha reconocido el entrenador en rueda de prensa, le gusta hablar individualmente con los jugadores. "Con Kross habré hablado unas 20 veces", ha dicho. Isidoro San José bromeaba en Fútbol es Radio sobre este número de conversaciones. "Son muchas incluso a finales de temporada", comentaba jocosamente. "Si no hay ningún problema o algo que corregir, son demasiadas", decía más serio. Rafa habla con todos los jugadores. Todos los días, son varios los elegidos para hablar de fútbol. Al principio algunos jugadores pensaban que Benítez quería ganarse su confianza con estas conversaciones. Con el tiempo, se han dado cuenta de que no es así. Rafa simplemente busca la perfección futbolística.

Pasados los casi cuatro meses, la opinión de la plantilla ha ido cambiando. Ha pasado de ser el pesado de los entrenamientos sin ritmo y con demasiadas conversaciones tácticas, a ser el meticuloso. Todo, poco a poco, como ha reconocido Pepe, "le gusta mucho el trabajo táctico y nosotros todavía nos estamos habituando a su forma de trabajar".

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