Nuevo episodio en las batallas internas de los partidos separatistas. La mesa de la cámara autonómica catalana ha rechazado la petición de reconsideración formulada por Junts per Catalunya (JxCat) para que Laura Borràs volviera a ocupar el cargo de presidenta del parlamento catalán. Los posconvergentes presentaron hace unos días tal petición y forzaron una reunión del órgano directivo del Parlament que ha concluido como la reunión del pasado 28 de julio en la que Borràs fue suspendida de sus funciones como presidenta y diputada al estar incursa en un proceso por corrupción.
La novedad es que JxCat ha tratado de sacar partido de la resolución del comité de Derechos Humanos que sostiene que el Estado español vulneró los derechos políticos de Oriol Junqueras, Raül Romeva, Josep Rull y Jordi Turull al retirarles el acta de diputados en 2018 cuando todavía no habían sido condenados por el golpe de Estado. Según la lectura de JxCat, tal dictamen sería de aplicación también para Laura Borràs a pesar de la diferente naturaleza de los delitos.
Borràs está procesada por prevaricación y falsedad documental por haber concedido y troceado subvenciones a un amigo cuando dirigía la Institución de las Letras Catalanas, entre 2014 y 2017. Y está a la espera de juicio en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). Y el reglamento de la cámara es tajante al respecto y obliga a suspender a los diputados que estén procesados por delitos vinculados a la corrupción política.
El reglamento de la cámara
En la sesión de la mesa de este jueves, todos los grupos se han aferrado al reglamento de la cámara para tumbar la reconsideración pedida por JxCat con el nuevo alegato del dictamen del comité de la ONU. Además, que JxCat haya utilizado esa resolución ha irritado a ERC, que considera que no es lo mismo haber participado en la organización del referéndum ilegal y en la proclamación de la república que unas "corruptelas", en expresión de la portavoz republicana Marta Vilalta. También han reprochado que hayan impedido una celebración conjunta del independentismo tras la resolución que, "por abreviar", atribuyen a la ONU en vez de a un órgano meramente consultivo.
En este contexto, crece la tensión entre los dos principales partidos separatistas y Jordi Turull, secretario general de JxCat, ha advertido que la posibilidad de una salida de su partido del gobierno autonómico es "real".