La Plaza Mayor de Salamanca ha sido este miércoles el escenario del acto central del Día de la Policía Nacional, que un año más se ha celebrado en plena polémica por la concesión de las medallas del cuerpo, que han generado un fuerte malestar interno. Y, como no, esa molestia se ha focalizado en el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, que ha sido silbado y abucheado durante buena parte del acto.
El primer momento clave ha sido al inicio, cuando el locutor del acto ha anunciado la llegada del ministro a la plaza donde se estaba realizando el acto. Se han escuchado entonces fuertes pitidos y abucheos, acompañados de gritos de "¡fuera! ¡fuera!", que se han prolongado durante varios minutos. De hecho, el propio Marlaska ha pasado revista a la formación de agentes de la Policía Nacional entre abucheos.
El segundo momento clave ha tenido lugar una hora después, cuando el locutor del acto ha anunciado que el titular de la cartera de Interior iba a tomar la palabra. Los silbidos y los abucheos han vuelto a hacer acto de presencia y han acompañado buena parte de la intervención de Marlaska, que se ha prolongado durante unos 12 minutos, y se han calmado cuando el ministro ha dejado el estrado.
La polémica ha surgido este año porque Fernando Grande Marlaska ha decidido condecorar tanto al presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde Pumpido, como a un comisario principal responsable de unos exámenes de ortografía que están puesto en duda por la justicia. Además, se ha criticado que sólo uno de los siete comisarios premiados con la Medalla de Plata de la Policía se encuentra todavía en activo.
La decisión del máximo responsable de la seguridad en nuestro país ha provocado que los dos sindicatos mayoritarios, SUP y JUPOL, anunciasen que van a denunciar por prevaricación al ministro Marlaska. En la misma línea, el SPP, el sindicato que arrasa entre los mandos policiales, exigió al Ministerio del Interior que modernice la ley de condecoraciones, que está en vigor desde 1964, hace casi 60 años.
En esta inercia, el Sindicato Policial de Policía (SUP), realizó días después un informe sobre entrega de medallas y condecoraciones en la Policía Nacional en el que, entre otras cosas, recogía los 5 casos "más sangrantes" de intervenciones policiales que no iban a ser distinguidas por Marlaska, y que a juicio de los agentes merecían distinciones que iban desde la Cruz al Mérito Policial con distintivo blanco a la Cruz al Mérito Policial con distintivo rojo.

