
El dúo dinámico formado por José María Garrido y Rubén Rozas no parece haber aprendido del escarnio que sufrió su famosa exclusiva de que el juez Peinado tenía dos DNI, lo que le permitía acumular un sinfín de propiedades, muchas de las cuales en realidad pertenecían a otro señor que también se llamaba Juan Carlos Peinado y era el legítimo propietario del segundo DNI. No, han seguido su campaña contra el magistrado por el singular crimen de investigar los posibles delitos de Begoña Gómez y su entorno con noticias cada vez más retorcidas y ridículas. Pero este miércoles han logrado algo que parecía imposible: igualar en estupidez el bulo del doble DNI.
La exclusiva que estos valerosos reporteros a servicio del PSOE han revelado al mundo consiste en que la mujer de Peinado es una funcionaria que trabaja para el Ayuntamiento, y que lleva siéndolo desde hace 40 años cuando se sacó la oposición. En lugar de resaltar la normalidad de que una señora sea funcionara por oposición en contraste con lo que parece la forma habitual en que las mujeres socialistas acceden al empleo público, según hemos visto con todas las Jessicas de la banda de Sánchez, los dos aguerridos periodistas decidieron que había algo nefando en ello. Así que lo asociaron a un supuesto favor al alcalde de Madrid.
Según la tesis de El Plural, la mujer del juez Peinado estaría trabajando en el Ayuntamiento desde hace cuarenta años porque el magistrado se habría retrasado en solicitar una prórroga de la instrucción del caso de un contrato público de 72.600 euros dado por la Empresa Municipal de Transportes a la editora de OkDiario para organizar "unas jornadas en diciembre de 2022, coincidiendo con la campaña municipal", según el diario, a pesar de que las elecciones se celebraron cinco meses después, el 28 de mayo de 2023. El retraso obligó, previo recurso, al archivo de las diligencias. Una situación que también han sufrido casos como el de Isofotón o Tsunami Democràtic tras la reforma de 2020 del Gobierno de Pedro Sánchez de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que estableció que las diligencias practicadas tras el vencimiento del plazo sin prórroga son nulas.
Pero el hecho de que los mismos periodistas reconocieran que la funcionaria llevaba 40 años siéndolo provocaron que en redes sociales se burlaran de la fabulosa exclusiva.
¿Y en la misma noticia vais y decís que es funcionaria desde hace 40 años? No sois un diario, sois un meme con mucho texto pic.twitter.com/p19RLTWv2W
— Juan Mas (@juan_mas) July 9, 2025
¿Y cuál ha sido la reacción del medio? No han borrado la noticia ni han rectificado. No. Lo que han hecho es borrar el tuit original y republicarlo para evitar que se vieran las contestaciones que habían recibido y editar la noticia para eliminar toda referencia a los "aproximadamente más de cuarenta años" que lleva siendo funcionaria la mujer del juez Peinado, dejando así el párrafo en cuestión:
Según ha tenido constancia este periódico, la persona que centra estas líneas accedió al consistorio mediante oposición, por lo que es personal funcionario del Ayuntamiento desde hace años, pero ahora ocupa un lugar destacado en el mismo.
Esperamos ansiosos la reacción de los verificadores de bulos a esta última exclusiva del digital del PSOE y a la retirada de sus credenciales para trabajar en el Congreso, ya que se supone que la falta de rigor es la causa que los políticos alegan para prohibir que los reporteros les hagan preguntas incómodas.
Pero la España sanchista no funciona así. Tras el ridículo del doble DNI, la directora entonces de El Plural, Angélica Rubio, fue recompensada con un puesto de consejera de RTVE tras garantizarse el PSOE el control absoluto de la televisión pública en la vergonzosa sesión del Congreso el día de la dana y uno de los dos autores tanto de aquella noticia como de ésta, Jose María Garrido, fue ascendido a director. El acoso a los jueces que se atrevan a investigar la corrupción de la familia de Pedro Sánchez, aun mediante bulos ridículos y las chorradas más absurdas, se premian en los prestigiosos medios de la izquierda que luego pretenden enseñar a los demás qué es y cómo se hace el periodismo.


