Menú

El alto precio del show de Sánchez y su "monaguillo": "Tardaremos años en recuperar el crédito internacional"

Inocencio Arias y Florentino Portero analizan las crisis diplomáticas abiertas con Argentina y con Israel tras el reconocimiento del Estado Palestino.

Inocencio Arias y Florentino Portero analizan las crisis diplomáticas abiertas con Argentina y con Israel tras el reconocimiento del Estado Palestino.
Pedro Sánchez junto al ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en una imagen de archivo | Europa Press

Desde que llegó a La Moncloa, la política internacional de Pedro Sánchez siempre ha estado en el punto de mira. Sin embargo, nunca antes había llevado a España a una situación tan crítica. A los enfrentamientos con Marruecos, Argelia y hasta con el alemán Manfred Weber —al que llegó a llamar nazi en el Parlamento Europeo—, se suman ahora las dos graves crisis diplomáticas provocadas por el Gobierno en cuestión de días: la crisis abierta con Argentina y la provocada con Israel tras el anuncio del reconocimiento del Estado Palestino y la utilización del famoso lema de los terroristas de Hamás por parte de la vicepresidenta Yolanda Díaz.

"Lo más grave es que ambas crisis, que aparentemente son muy distantes incluso por razones geográficas, se han producido por subordinar la política exterior de España a los intereses puramente partidistas del PSOE, que tiene por delante unas complicadas elecciones europeas y quizás unas generales a continuación", lamenta Florentino Portero, historiador y analista de relaciones internacionales. "Lo llamativo es que un estado maduro, un estado europeo y de la alianza atlántica como es España haga una tropelía como esta, porque, evidentemente, el coste en crédito internacional es muy alto", alerta el experto, que asegura que, incluso aunque Sánchez abandone el Gobierno, "tardaremos años en recuperarlo".

"Con todo esto, Sánchez cree que gana fama de líder, pero lo que está consiguiendo es dar una imagen de vedetista, de querer figurar, y en la Unión Europea gustan muy poco los gallitos", añade Inocencio Arias, uno de los diplomáticos con más experiencia en nuestro país. "Su único objetivo es buscar titulares a costa de lo que sea. Si pudiera impedir que Kroos se fuera del Real Madrid, montaba una operación para que todos los medios titulasen que Sánchez impide que Kroos se retire", dice con ironía.

El que fuera portavoz de Exteriores con distintos gobiernos de UCD, PP y PSOE tampoco olvida la responsabilidad de su fiel escudero en política internacional, el ministro José Manuel Albares. "Es un acólito de Sánchez, un monaguillo. Lo único que hace es actuar de palmero, como cuando el otro día empezó a decir chiquilladas con lo de Milei, como que el famoso insulto no tiene precedentes. ¡Claro que hay precedentes de otros presidentes iberoamericanos que nos han insultado! Lo que no tiene precedentes es que el enfrentamiento empiece por un ministro español, llamando nada menos que drogata al presidente de una nación".

La principal consecuencia

Más allá de los episodios concretos que abordaremos a continuación, tanto Arias como Portero coinciden en que ese afán de protagonismo tiene sus consecuencias para el país. "La diplomacia es siempre de Estado, nunca es de partido. Todos los países te miran para entender cuáles son tus intereses y a dónde vas. Si perciben que no tienes una idea clara y que das bandazos, sencillamente dejan de mirarte: estás ahí, pero no cuentan contigo para nada", explica Portero.

Y eso es precisamente lo que estaría sucediendo; máxime, después de que Sánchez haya anunciado finalmente el reconocimiento del Estado Palestino: "En la OTAN ya hablan de que España es un país no alineado con la Alianza Atlántica y no alineado con la Unión Europea, que va por libre, que es errático y que subordina los intereses de su política exterior a los intereses de partido, y esto implica que dejan de contar contigo". Y Lo realmente peligroso es que las consecuencias de las políticas de un PSOE que seguirá existiendo, incluso aunque Sánchez se vaya, van más allá de lo que dura una legislatura. "Al PP llevan años diciéndoselo en Washington y en Berlín: sabemos quiénes son ustedes, pero no podemos negociar nada, porque mañana hay cambio de Gobierno y España es otra cosa", advierte Portero.

El reconocimiento del Estado Palestino

Por lo que respecta a la crisis abierta con Israel, los analistas insisten en que el problema ya no es el reconocimiento en sí mismo del Estado Palestino, sino la fecha elegida por el Gobierno de Pedro Sánchez. "Yo no estoy en contra, pero no es el momento —sentencia Inocencio Arias—. Y prueba de ello es que lo hacemos prácticamente solos, únicamente con Irlanda y Noruega. Sánchez ha intentado convencer a otros países, sobre todo a los grandes, pero no lo ha conseguido. Y, al destacarte, está claro que puedes enfadar a alguien. Ya no solo a Israel, sino también a EEUU, a algún país árabe y, como decía antes, a los propios europeos, a los que no les gustan los gallitos".

"Si fuese en otro momento, diría simplemente que es una frivolidad -dice Florentino Portero-, porque reconocer un Estado cuando no existe realmente, no vale para nada, pero, en estos momentos, es claramente un espaldarazo a Hamás y un regalo para Irán, que es quien está detrás". En este sentido, el analista considera igualmente graves las palabras de Yolanda Díaz, haciendo suyo el lema de los terroristas: "Palestina libre desde el río hasta el mar".

"El apostar por la desaparición de un Estado como es Israel es una barbaridad y tiene toda la dimensión del antisemitismo. Y lo peor es que esto ni ha provocado una crisis de Gobierno ni ha hecho que Sánchez pida disculpas por sus declaraciones. Todo esto tiene una carga tremenda, y claramente nos sitúa al lado del Grupo de Puebla y de Irán, y nos aleja radicalmente de Estados Unidos y del núcleo importante de la Unión Europea", advierte.

La crisis abierta con Argentina

Capítulo aparte merece la crisis con Argentina, que, según Inocencio Arias, no se resolverá, como pronto, hasta que pase el 9 de junio: "Mientras estemos en campaña, no habrá solución porque, en la mentalidad de Sánchez, esto tiene un componente electoral. Si no hubiera unas elecciones a la vista y en vez de insultar a su mujer hubieran insultado a otra persona, hubiera mirado para otro lado como hizo cuando el presidente mexicano tuvo unas palabras muy desconsideradas hacia el Rey Felipe o cuando otros, como Maduro, nos han insultado".

Además, si algo tiene claro el diplomático es que Milei no va a pedir disculpas por llamar corrupta a su mujer, algo que incluso él mismo entiende perfectamente. "Aunque es evidente que se excedió en el calificativo, tiene una base, porque ha tenido una conducta anómala y poco decorosa, impropia de la mujer de un presidente democrático, pero es que, además, exigir que le pida disculpas es una memez, porque Milei fue el primer insultado. Si yo fuera un presidente iberoamericano, le diría ‘empiece usted por disculparse y luego ya si eso diré yo que me he excedido’".

En esta línea, Florentino Portero recuerda que "Óscar Puente no ha pedido disculpas por lo que dijo, sino que ha pedido disculpas por decirlo públicamente". Y Sánchez tampoco lo ha hecho por él. "Una vez más, ha primado los intereses del partido, la movilización del voto, a costa de las relaciones con Argentina, a pesar de la relación tan antigua que tenemos, a pesar de haber tantos españoles viviendo allí y a pesar de las relaciones económicas tan importantes que existen entre ambos países", lamenta.

Aunque ni uno ni otro creen que esto vaya a suponer una ruptura de las relaciones, la retirada de la embajadora podría tener graves consecuencias. A priori, según explica Inocencio Arias, la embajada no tiene por qué dejar de funcionar, ya que cuenta con un extenso personal que es el que se encarga de todo. Sin embargo, Portero hace hincapié en que, al no tratarse de una mera llamada a consultas, los problemas llegarán cuando el Gobierno quiera revertir la situación. "Ahora mismo, España se ha quedado sin embajador en Argentina, por lo que hay que nombrar uno nuevo, pero, para nombrarlo, tú tienes que enviar la solicitud de plácet y Argentina la puede dar o no, con lo que le ha dado todo el poder".

La gran pregunta es qué pasará el próximo día 21 de junio, la fecha en la que Milei tiene previsto regresar a nuestro país para recoger un premio del Instituto Juan de Mariana. El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha amagado con no dejarle entrar en España. Sin embargo, Inocencio Arias no cree que la sangre llegue al río: "Sería un escándalo y, si la visita fuera el día antes de las elecciones, igual Sánchez se movería para hacer una declaración que excitase a Milei y tener así una excusa para no dejarle entrar, pero, siendo después de las elecciones, no creo que se lo impidan. Sería un bombazo".

Temas

En España

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Biblia Ilustrada
    • Libro