
El expresidente socialista del Gobierno Felipe González ha reconocido ahora que sigue dudando si hizo bien o mal al decidir no intervenir cuando pudo eliminar a la cúpula de la banda terrorista ETA un día que él sitúa entre los años 1989 y 1990. Los dirigentes de la banda terrorista se encontraban "perfectamente y localizados" en una casa ubicada en territorio francés.
A sabiendas de que no había posibilidad de detenerlos en otro país, su Ejecutivo pensó en "volarlos a todos juntos"; algo que finalmente no hizo por las posibles repercusiones diplomáticas que habría tenido esta operación con Francia, país fundador de la Comunidad Económica Europea, organismo en el que España había entrado en 1986. Así, asegura que todavía no tiene claro si esa fue o no la decisión correcta: "33 años después vuelvo a pensarlo y vuelvo a tener dudas de si lo hice bien o mal".
Así lo ha revelado el ex secretario general de los socialistas en el documental La última llamada de Movistar, que reúne el testimonio de todos los expresidentes vivos del país. No es la primera vez que González explica esta posibilidad, ya que en una entrevista ofrecida a El País en el año 2010 aseguró que pensó en eliminar a la cúpula de ETA porque "la posibilidad de que la operación la hiciese Francia en aquel momento era muy escasa".
'La última llamada' es la que recibe el presidente de Gobierno de un país cuando la decisión solo la puede tomar él. Esta fue la de Felipe González. Los cuatro episodios de la serie documental, ya disponibles. pic.twitter.com/8REK4HZVGd
— Movistar Plus+ (@MovistarPlus) October 16, 2025
Para González, esta era una posibilidad de salvar "50 o 60 vidas" al descabezar a una banda que estaba asesinando a decenas de personas por año. De hecho, de los 850 muertos que se le atribuyen a la banda terrorista, más de 200 fueron después de 1990, cuando el entonces líder socialista tuvo la posibilidad de eliminar a la cúpula etarra. Además, el tercer año más sangriento de la historia de ETA se consumó en 1991, en el que la misma cúpula con la que podría haber acabado González decidió 46 asesinatos. "Dudo de mi responsabilidad", explica González en el documental.
Cabe recordar que, aunque González negó en todo momento su vinculación y la de su Gobierno con los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL), existen numerosas evidencias que él era "el señor X", como se referían los dirigentes de los GAL al líder de la trama de terrorismo de Estado. Estos operaron entre los años 1983 y 1987 y perpetraron varios atentados que buscaban atacar a ETA cometiendo numerosos errores que acabaron con 27 muertos, algunos de ellos civiles inocentes.


