
El Ejército de Israel ha revelado imágenes impactantes que muestran a Yahya Sinwar, líder de Hamás, refugiándose en un túnel subterráneo horas antes de que sus milicianos lanzaran la brutal masacre del 7 de octubre de 2023. Mientras los terroristas de Hamás asesinaban a 1.200 israelíes y secuestraban a más de 200, Sinwar, el principal arquitecto de esa atrocidad, se escondía junto a su familia en la vasta red de túneles construida bajo Gaza, demostrando una cobardía absoluta tanto frente a Israel como hacia su propio pueblo.
Imágenes captadas por cámaras subterráneas
En el vídeo, captado por cámaras instaladas en los túneles y encontrado meses después por las fuerzas de seguridad israelíes, se observa a Sinwar transportando bolsas, botellas de agua y otros artículos básicos mientras se prepara para ocultarse. Este acto ocurrió en la noche del 6 de octubre, a las 22:45, hora local de Gaza, apenas horas antes de que la masacre comenzara. La última imagen de Sinwar fue registrada a la 1:32 de la madrugada del 7 de octubre, sellando su vergonzosa huida.
Así se escondió Sinwar, líder de Hamás, el día previo al 7-O, huyendo por los túneles de Gaza con su familia
Se trasladaron con sus pertenencias siendo conscientes de que permanecerían una gran temporada escondidos pic.twitter.com/3NHaG4GnmD
— Libertad Digital (@libertaddigital) October 20, 2024
Mientras Sinwar se refugiaba bajo tierra, protegido y a salvo, el caos se desataba en la superficie. No solo los israelíes inocentes fueron víctimas de este ataque, sino también cientos de palestinos que, desprotegidos, quedaron expuestos a las represalias y al horror de la guerra desatada por Hamás. Mientras los gazatíes morían en la superficie, Sinwar se escondía, indiferente al sufrimiento de su propio pueblo.
La fría indiferencia de Sinwar
La cobardía de Sinwar no es algo nuevo. Durante su estancia en una prisión israelí, tras ser condenado a varias cadenas perpetuas por el asesinato de soldados israelíes y colaboradores palestinos, ya había demostrado su desprecio por la vida humana. Cuando un oficial de inteligencia le preguntó si valía la pena que murieran 10.000 personas por su causa, Sinwar respondió sin pestañear: "Incluso si son 100.000". Esa fue siempre su filosofía: sacrificar a su pueblo mientras él se escondía en la seguridad de los túneles.
La muerte de Sinwar plantea la posibilidad de que los 101 rehenes que aún permanecen secuestrados por Hamás sean finalmente liberados. Aunque algunos de ellos podrían haber sido asesinados, el gobierno israelí ha instado a los secuestradores a liberar a los cautivos, prometiéndoles un trato más indulgente si lo hacen. Con Sinwar fuera de la ecuación, la presión para la liberación de los rehenes aumenta.


