Galicia

La reaparecida plataforma Nunca Mais volvió a manifestarse este domingo y repitió los ataques al PP, al que ha encontrado como único responsable de la ola de incendios que arrasó Galicia durante doce días. Otra vez volvió a criminalizar a los populares con consignas como "Partido Popular, terrorismo ambiental". El responsable del PP gallego ha atribuido estas acusaciones a una campaña para desviar la atención ante la pésima gestión de la catástrofe. En la COPE, Alberto Núñez Feijóo ha hablado de una "estrategia más de confusión" y "una tomadura de pelo, que en este caso no cuela".

En el Congreso funcionó el bloqueo del PSOE y los nacionalistas para que ni Narbona ni Rubalcaba hablen de los incendios y sus supuestas tramas. Fuera de la Cámara, Nunca Mais salió en defensa de la Xunta pero se topó con asociaciones independientes que han recordado el verdadero papel de la plataforma propagandista. El PP exigió la dimisión de Cristina Narbona "por sembrar bulos y por negligencia". Hasta Touriño se apeó de las tesis de la ministra. Zaplana apuntó que si el detenido que fue candidato del PSOE en las municipales hubiera sido del PP, "hoy sería el delincuente más conocido del país". El escándalo del día llegó con la reflexión del consejero gallego de Medio Ambiente: "El 98 por ciento de Galicia no ardió".

El presidente gallego pretende zanjar la catástrofe provocada por el fuego en Galicia con una "comisión de estudio" que reoriente la política forestal. El PP regional exige que si se creó una comisión de investigación en el Parlamento autonómico por la crisis del Prestige y de las vacas locas "sin producirse ninguna muerte" ahora está más justificada. Las llamas han costado la vida a cuatro vecinos y Núñez Feijóo cree que "los políticos tenemos la obligación de explicar si la muerte de estas personas se puedo evitar".

Ecologistas de Nunca Mais y políticos de la Xunta de Galicia han protestado juntos este domingo por el "terrorismo ambiental", entre gritos y pancartas contra el PP. Una manifestación de 20.000 personas, según la Policía Local, ha recorrido el centro de Santiago con consignas como Partido Popular, terrorismo ambiental. En la anterior manifestación de Nunca Mais por los incendios forestales, ya se exhibieron pancartas como Mariano Rajoy debe morir. Miembros del BNG y del PSOE se han unido a una manifestación en la que, en ningún momento, se ha señalado la responsabilidad de la Xunta y del Gobierno por la catástrofe. Mientras tanto, Cristina Narbona ha desarrollado en El País su teoría sobre la "alta proporción de pirómanos" de Galicia. Todo se debe a que es una "sociedad muy caciquil, muy rural, vulnerable y deprimida" .

La ministra de Medio Ambiente opina que "los gallegos le tienen miedo a su propia debilidad" y que en esta región "persiste una sociedad muy caciquil, muy rural, una situación muy vulnerable y deprimida económicamente en el campo", lo que, unido a "la pobreza, la desinformación" y "el aislamiento del territorio" explica, a su juicio, "la omertá" o ley del silencio que protege a los supuestos pirómanos. En estos términos, analiza la responsabilidad de la sociedad gallega en los recientes incendios, en una entrevista con El País. No es la primera vez que Cristina Narbona justifica lo ocurrido entre el 5 y el 16 de agosto como una consecuencia del "subdesarrollo" de esta región. El pasado 9 de agosto, en plena crisis, afirmó que en Galicia "hay un número más alto de pirómanos en proporción que en el conjunto de España". El PP ha exigido su dimisión.

Cientos de gallegos secundan este domingo la convocatoria de la manifestación hecha por la plataforma "Nunca Máis" que recorre varias calles de Santiago de Compostela para "mostrar su rechazo al terrorismo incendiario y reclamando una nueva política forestal en Galicia". Los participantes en esta movilización portan numerosas banderas, y pegatinas de Nunca Máis y gritan diversas consignas, como "Partido Popular, terrorismo ambiental". No es la primera vez que simpatizantes de esta organización arremeten contra el PP. El 9 de agosto celebraron una marcha en la que podían leerse consignas como "Rajoy debe morir".

La manifestación del pasado 9 de agosto en Santiago de Compostela revivió las peores épocas del acoso político organizado tras el caso Prestige. Las pancartas de Nuca Máis volvieron a estar presentes pese a que se quiso hacer ver que todo era espontáneo. No protestaron contra el Gobierno ni contra la Xunta sino desempolvando las consignas con las que nacieron, es decir, contra el PP. Las pancartas que pudieron verse el día 9 decían cosas como "¿A quién beneficia el terrorismo del fuego?", "PP-irómanos" o, directamente, "Rajoy debe morir". Toda una muestra de cómo se posicionan los simpatizantes de Nunca Mais contra lo que califican de "terrorismo incendiario". Este domingo vuelven a la calle en Santiago de Compostela.

El presidente de la Xunta ha anunciado que una comisión en el Parlamento gallego analizará la ola de incendios y diseñará medidas para que no se repita. Touriño, tras reunirse con los alcaldes de los municipios más afectados, les ha prometido indemnizaciones y cambios en la política forestal. Además, anunció que los detenidos son 34 personas que definió como "normales" y que "sabían el daño que hacían", descartando de nuevo la tesis de la trama. Las patrullas antiincendios, que seguirán trabajando "igual que el primer día", acusaron horas antes a la Xunta de "abandono".

Señalados por el Gobierno central, que no dudó en criminalizar a una parte de este colectivo "despechado", una treintena de trabajadores del servicio de prevención y defensa contra incendios forestales de la Xunta de Galicia se han concentrado en La Coruña. Frente a la sede del Ejecutivo autonómico han denunciado la situación de "abandono y menosprecio", especialmente, de la Consejería de Medio Rural de la que dependen. Con la protesta también han querido defender su profesionalidad frente a los últimos ataques.