El Tribunal de Cuentas ha revelado que los cabecillas de la trama Nóos, Iñaki Urdangarín y Diego Torres, obtuvieron un beneficio neto de un millón de euros por la organización de cada congreso Valencia Summit –en total, fueron tres las ediciones celebradas entre 2004 y 2006-, cuando el coste real de cada evento osciló alrededor de los 160.000 euros.
Según informa El Mundo, el Tribunal de Cuentas muestra que el duque de Palma y su socio Diego Torres llegaron a exigir, en un principio, unos honorarios de 1.044.000 euros por el diseño del proyecto, al mismo tiempo que pidieron que los gastos derivados del montaje de la iniciativa fueran pagados por la autonomía que presidía, por entonces, Francisco Camps.
Así, Urdangarín y Torres cobraban por poner la idea y no incurrían en ningún gasto material para llevarla a la práctica. En el presupuesto previo que presentaron a la Comunidad Valenciana, calcularon que cada una de las ediciones –de apenas dos días de duración- costaría 1.351.638 euros. Finalmente, la Generalidad aceptó correr con los gastos, aunque rebajó los honorarios de Urdangarín y de su socio.
Pese a todo, el marido de la infanta Cristina y Torres llegaron a recaudar entre 1,1 y 1,2 millones de euros por edición. El expediente examinado por el Tribunal de Cuentas detalla que se emplearon 4.888 euros en decoración; 7.348 en cartelería; 24.551 euros en audiovisuales; 22.587 en panelados; 5.508 en moquetas; 1.211 en limpieza, y 413 en azafatas.
Además, con cargo a la Comunidad Valenciana se gastaron 7.320 euros en intérpretes, 1.280 en plantas y 21.596 en chóferes. Destaca, por encima del resto de conceptos, una partida de 62.571 euros en cátering.
