Menú

En defensa de las pijas

Y de aquellos mitificados pijitos franceses, estos descerebrados lodos mesetarios. ¿Cuántas horas habremos de esperar hasta que la autoridad nos haga comprender que los bestias de Pozuelo no deben ser juzgados por sus actos, dada su condición de jóvenes?

Hipatia dijo el día 8 de Septiembre de 2009 a las 15:15:

Como siempre certero. No hay nada como vivir en Cataluña para tener un observatorio fidedigno acerca de la demagogia. Andasulía también es un buen sitio, algo rústico, diría yo, pues allí la mejor industria que tenemos es la de la aceituna aliñá, I+D, como diría el Duce.

Al que la masa socialista llama pijo, se le critica porque es diferente, no ordinario y común, por eso se le odia. En esta política con tampoco brillo donde se propugna la forzada igualdad, el genio y el diferente están proscritos.

El pijo no necesariamente es rico (si no sería socialista) de aquellos lodos parisinos vienen estos barros.

xka dijo el día 8 de Septiembre de 2009 a las 08:25:

Hombre, digo yo que el hecho de ser pijos, le da un puntito de gravedad extra (naturalmente, sin quitarla en otros casos semejantes pero sin pijos). Y lo digo, porque es de suponer que el pijerío tiene acceso a más medios, a más educación, a más nivel de vida..lo cual nos dice mucho de nuestro actual sistema educacional.

Y si así están los pijos, como estará el resto.

FERRUZ dijo el día 7 de Septiembre de 2009 a las 23:44:

Quizás sea ya hora, y a lo mejor así empezaban a cambiar las cosas, de que las personas de una cierta edad dejemos de permitir ese avasallamiento de la juventud y el desprecio de los "pijoprogresdepacotilladegauchedivine" y reivindiquemos el orgullo de pertenecer a unas generaciones que recibimos una educación homologable a la del resto de Europa (y no como la de ahora). Admiro a esa parte de la juventud actual que han logrado ser personas a pesar del repugnante caldo de cultivo en que han crecido y, probablemente, haya menos personas analfabetas totales (que no funcionales) que en anteriores épocas. Pero la juventud culta de mi generación era, por necesidad, MUCHO más culta que la actual; basta con comparar contenidos de planes de estudio para constatar la afirmación. Y eso, quedándome en los conocimientos convencionales; ya no digo si se entra en las enseñanzas de comportamiento, de relaciones sociales, de saber estar, de "tener al menos una cierta clase", etc.