Menú
EDITORIAL

Los Mozos de Escuadra y la destrucción de pruebas

Los Mozos son una policía ominosamente politizada, hasta el extremo de seguir fielmente a los independentistas en la senda de la mentira y el delito.

Primero se supo que entre las más de 30 cajas de documentación que los Mozos de Escuadra quisieron destruir el pasado 26 de octubre en una incineradora de Sant Adrià de Besòs había pruebas de la negativa de algunos mandos de la Policía autonómica a cumplir con su deber de impedir la celebración de la consulta secesionista del 1-O. Hace escasas semanas se supo también que entre la documentación felizmente interceptada por la Policía Nacional –siguiendo órdenes de la juez Lamela– había una prueba de un desvío de tres millones de euros procedentes del Fondo de Liquidez Autonómica, que los golpistas habrían destinado a sufragar su referéndum ilegal. Finalmente, esta semana se ha hecho público que entre la referida documentación estaba también la alerta emitida por los servicios de inteligencia EEUU sobre la amenaza de un ataque terrorista en Las Ramblas de Barcelona meses antes de que se produjera.

Respecto a esto último, recuérdese que ya el 31 de agosto El Periódico desveló la existencia de esa nota emitida el 25 de mayo por los servicios de inteligencia estadounidenses en la que se alertaba sobre un posible atentado islamista en Las Ramblas; aviso que, tras los atentados yihadistas del 17 de agosto en Barcelona y Cambrils, Puigdemont, su consejero de Interior, Joaquim Forn, y el entonces mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, tuvieron la desfachatez de desmentir calificándolo de montaje y asegurando que carecía de toda "veracidad".

Está visto que –con las encomiables excepciones que muchos de sus agentes puedan ofrecer a título individual– los Mozos son una policía ominosamente politizada, hasta el extremo de seguir fielmente a los independentistas en la senda de la mentira y el delito. Y lo que resulta inaudito es la escasa reacción de las formaciones constitucionalistas ante noticias de tan grave calado.

Sólo desde la conciencia del error que supuso la tan tardía aplicación del artículo 155 y del aún más criticable disparate que ha supuesto intervenir la Generalidad en rebeldía para convocar inmediatamente nuevas elecciones, que han vuelto a arrojar una mayoría separatista, puede explicarse tan clamoroso silencio constitucionalista. De hecho, la única reacción que se ha producido al intento de destrucción de pruebas por parte de los Mozos ha sido la de Ciudadanos; formación que, aun desechando la petición de responsabilidades políticas y sin centrarse en la flagrante mentira de los separatistas respecto de la advertencia de la CIA, al menos ha solicitado una comisión de investigación en el Congreso sobre los atentados en Cataluña y los eventuales "fallos" de coordinación policial.

Con todo, el requisito previo a todo intento de enmendar cualquier fallo de coordinación policial pasa por asegurarse que todos los cuerpos están al servicio de la ley. Y ese, evidentemente, no es el caso de los Mozos de Escuadra cuando se les deja a las órdenes de unos golpistas.

Temas

En España

    0
    comentarios