
Dicen que el Atlético busca un regateador y si consigue encontrar a uno la mitad de eficaz que lo es el propio club para regatear a la ambición seguramente el Atlético tendría un jugador tan decisivo como Messi o Lamine Yamal. Porque el club es experto en regatear a la ambición. La encara cada año y la supera cada curso. Finta para un lado y dejan la ambición atrás. Tiran un caño y la ambición es superada. Incluso cuando parece que por fin van a atreverse a abrazarla llega un último movimiento espectacular del club y de nuevo la regatean dejando a la afición con al boca abierta. Para mal, por supuesto.
Este año parecía que el Atlético podía dar un salto de calidad real si mantenía el mismo nivel de mercado de fichajes con el que inició el mes de julio y a los Baena, Almada o Cardoso se unían otros que aparte de calidad supliesen problemas estructurales de la plantilla. No ha sido así. Bien es cierto que jugadores como Ruggeri o Pubill han venido a cubrir los laterales, sin embargo, solo el italiano parece tener un puesto fijo y ojo porque lo mismo no es así ya que Hancko, otro gran fichaje rojiblanco, podría acabar jugando en ese sector.
El Atlético, según ellos, ha finalizado ya su mercado de fichajes y a mí de primeras me falta un central, un medio que venga como recambio de Rodrigo De Paul, un regateador y alguien que haga las veces de Correa. Eso como mínimo, porque si aumentamos la ambición, un 9 goleador de verdad le habría venido de lujo al ataque del Cholo Simeone para acompañar a Julián Álvarez. Hasta cuatro puestos están aún huérfanos y lo peor de todo es que en los dos primeros partidos de Liga donde solo se ha sumado un punto de seis, el Atlético ha echado de menos precisamente un central, un medio, un regateador y un 9. Todo lo que decimos que le falta al Atlético se ha visto reflejado en las dos primeras jornadas de Liga y lejos de que eso asuste a la directiva y a la dirección deportiva, la solución es dejar de nuevo al Cholo con un Tetris de plantilla.
No me gusta nada lo que se está formando alrededor del Atlético de Madrid este año. Nada de nada. Espero equivocarme lógicamente, pero sigo viendo el mismo germen de mediocridad en la toma de decisiones y eso irremediablemente se transmite a una plantilla que por momentos da la sensación de dejarse llevar o esconderse detrás de la figura de Simeone. Porque después de todo lo dicho quiero hacer una puntualización. Dos mejor dicho. Punto 1: el mercado del Atlético iba muy bien y al final se ha quedado, para variar, lejos de dar el salto ambicioso que debería. Punto 2: con la actual plantilla NO se puede sumar 1 de 6 ante Espanyol.
Espero que nadie en la plantilla ni en el cuerpo técnico se acomode pensando que el club ha vuelto a regatear a la ambición. Sobre todo porque dentro de ese vestuario, según lo visto el año pasado y en el inicio de este curso, hay también mucho regateador de la exigencia. El club se ha equivocado nuevamente en los retoques del barco, pero eso no quita para que el Atlético actual sin más fichajes sea infinitamente mejor que el Espanyol o que el Elche. Y esto no es faltar el respeto a los dos clubes sino exigirle al equipo del Cholo lo que todo el mundo, incluido él, saben que pueden dar.
Veo de momento a un Simeone que como el club ha cogido lo malo que tenía estos años anteriores y lo ha vuelto a poner sobre la mesa en este. Sus cambios por miedo costaron tres puntos en Barcelona y ante el Elche el equipo dio sensación de nuevo de no tener plan B o plan C. Tampoco balón parado, algo que me rechina especialmente cuando veo que de 10 córners el Atlético no solo no fue capaz de marcar en ninguno sino que ni siquiera remató a portería o fuera. El Cholo tiene muchísimas cosas buenas y por eso sigo confiando en él, sin embargo, si se empeña en seguir potenciando lo malo y lo que no funciona todo acabará de la misma manera o peor. Conclusión: el Atlético con fichajes es diferente y si los quitas antes de tiempo o no los pones tienes al mismo Atlético que decepcionó el año pasado.
Por cierto, para acabar me gustaría hablar de mentiras. Ajenas por supuesto. Las habituales de cada año firmadas por Mbappinvents o sucedanios. El Atlético, como reflejó el Twitter mi querido amigo Fran Guillén, ha tenido menos gasto neto que el Sunderland esta temporada. Por poner un ejemplo. Porque por mucho que a algunos les guste mentir, el fútbol funciona como en muchas empresas, con balances de ingresos y gastos, y es ahí donde se puede ver que el Atlético de súper potencia económica tiene poco. Van a seguir mintiendo, van a ponerse cifras irreales sin contar lo ingresado etc etc etc. Pero que no se preocupen los aficionados rojiblancos porque algunos seguiremos aquí para, como mínimo, señalar las mentiras que se cuentan. Arrancamos nuevo curso. Bienvenidos.
