L D (EFE)
Así lo manifestó este martes el secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca en la que dijo que la intención del Gobierno es que la Ley del Prado se apruebe antes de que finalice la presente Legislatura, pero intentando siempre contar con el respaldo de la oposición y de los ministerios de Administraciones Públicas y de Hacienda. Ambos ministerios presentaron hace dos años serias objeciones a la reforma del modelo jurídico del Prado, y esa fue una de las razones que, junto con las reticencias del PSOE, impulsó al presidente del Gobierno, José María Aznar, a aparcar la ley hasta que hubiera un mayor consenso.
"Gracias a Dios -decía hoy De Cuenca- se han ido limando todas esas asperezas, y ya es seguro que habrá una nueva ordenación jurídica del Prado, con la que se pretende dotar al museo "de un estatuto jurídico adecuado, sin renunciar en ningún momento al carácter público de la institución".
Al Gobierno le gustaría que la aprobación de esa futura ley coincidiera con el final de las obras de ampliación del museo, al menos con las que se realizan en el Casón del Buen Retiro y con las del edificio proyectado por el arquitecto Rafael Moneo, parte del cual se podría inaugurar en febrero de 2004, antes de que acabe la Legislatura, afirmó De Cuenca.
El Plan Integral de Museos que el Ministerio de Educación y Cultura puso en marcha "implica una serie de mejoras importantes" y ha hecho necesario revisar las tarifas", subida que aún deja a los museos españoles lejos de lo que se cobra, por ejemplo, en el Centro Pompidou (11,20 euros), la Galería de los Uffizi (9,5), o en el Louvre, 7,5 euros. A cambio de ese incremento, se ampliarán las bonificaciones existentes ahora para jubilados y jóvenes, entre otros, y se darán más facilidades en los billetes conjuntos para los grandes museos de Madrid: el Prado, el Reina Sofía y el Thyssen, inmersos los tres en un profundo proceso de ampliación "del que también se beneficiará el usuario", añadió el secretario.
"Gracias a Dios -decía hoy De Cuenca- se han ido limando todas esas asperezas, y ya es seguro que habrá una nueva ordenación jurídica del Prado, con la que se pretende dotar al museo "de un estatuto jurídico adecuado, sin renunciar en ningún momento al carácter público de la institución".
Al Gobierno le gustaría que la aprobación de esa futura ley coincidiera con el final de las obras de ampliación del museo, al menos con las que se realizan en el Casón del Buen Retiro y con las del edificio proyectado por el arquitecto Rafael Moneo, parte del cual se podría inaugurar en febrero de 2004, antes de que acabe la Legislatura, afirmó De Cuenca.
El Plan Integral de Museos que el Ministerio de Educación y Cultura puso en marcha "implica una serie de mejoras importantes" y ha hecho necesario revisar las tarifas", subida que aún deja a los museos españoles lejos de lo que se cobra, por ejemplo, en el Centro Pompidou (11,20 euros), la Galería de los Uffizi (9,5), o en el Louvre, 7,5 euros. A cambio de ese incremento, se ampliarán las bonificaciones existentes ahora para jubilados y jóvenes, entre otros, y se darán más facilidades en los billetes conjuntos para los grandes museos de Madrid: el Prado, el Reina Sofía y el Thyssen, inmersos los tres en un profundo proceso de ampliación "del que también se beneficiará el usuario", añadió el secretario.