
"Es muy doloroso dirigirme de nuevo a todos para comunicaros que ha emergido en el día de hoy el caso de una nueva alumna de Primaria que afirma haber sufrido agresión sexual por parte del excapellán del colegio", reza el nuevo comunicado de la directora de Highlands El Encinar. Según explica Marilú Álvarez —que tomó el relevo de Jesús María Delgado tras su dimisión, días después de la detención del padre Marcelino— "el relato ha emergido durante el desarrollo del taller Escudo de la Dignidad", puesto en marcha por el centro para la detección e intervención de abusos de esta naturaleza.
"He notificado esta nueva información a las autoridades policiales que investigan el caso, y he hablado con la familia de nuestra alumna, con la que estamos en estrecha comunicación para poner a su disposición todo el acompañamiento que requieran", añade el texto. La comunicación es muy similar a la emitida por Álvarez el pasado miércoles, cuando informó de la detección de otra presunta agresión sexual del religioso a una alumna de Primaria en las mismas circunstancias. A día de hoy, se habrían localizado ocho víctimas que afirman haber sido objeto abusos por parte del padre Marcelino.
Los dos nuevos casos de los que ha informado la dirección del centro se suman a los de las seis niñas de 6 y 7 años cuyos padres presentaron denuncia en marzo contra quien fuera mano derecha de Marcial Maciel, fundador de los Legionarios de Cristo y famoso pederasta. Precisamente este lunes comienza la toma de testimonios a las alumnas afectadas y sus familias en sede judicial, donde hasta hora sólo había declarado el capellán investigado. Tarea que se alargará hasta el próximo jueves. Las pequeñas presuntamente abusadas lo harán en la llamada cámara Gésel, donde las menores son grabadas como prueba preconstituida de cara al proceso.
La jueza que investiga las presuntas agresiones sexuales cometidas por el cura sobre las alumnas de primero de Primaria, también tomará declaración como testigos —el próximo 17 de junio— al exdirector del colegio y a dos profesoras que —según el testimonio de al menos una de las víctimas— tenían conocimiento de los hechos denunciados y no habrían hecho nada al respecto. Cabe recordar que el religioso denunciado negó las agresiones sexuales que se le imputan y argumentó que las acusaciones estaban motivas por su pasado cercano al pederasta Maciel, de quien fue secretario personal y persona de confianza.
Las llevaba a su "sitio secreto"
No obstante, las grabaciones de las cámaras de seguridad del colegio habrían confirmado que el cura pasaba tiempo a solas con las niñas —algo que no le estaba permitido a ningún trabajador del centro, según su código de conducta— en el lugar en el que ellas aseguran que les realizó los tocamientos y que denominan "sitio secreto".
La primera de las denunciantes, una pequeña de 6 años a la que llamaremos María (nombre ficticio), señaló claramente que "el padre Marcelino a veces nos molesta". Según explicó, les llevaba a su escondite en pequeños grupos (tres o cuatro a la vez). Extremo que también confirmaron las imágenes que constan en el sumario, al que ha tenido acceso Libertad Digital.
¿Qué responsabilidad tiene el centro?
Los padres de algunas de las víctimas creen que pudo haber responsabilidad civil subsidiaria tanto del centro como de los Legionarios de Cristo, ya que —recogen los informes policiales— el padre Marcelino "permanecía constantemente con menores de edad, y las conducía a zonas reservadas del colegio, sin que se dieran cuenta el resto de los empleados".
Además, la congregación había hecho caso omiso de la preocupación que muchas de las familias le habían comunicado ya en 2023 por el pasado del padre Marcelino, estrechamente vinculado pederasta Marcial Maciel, al mantenerle en sus funciones. Incluso habrían solicitado que declaren como investigados el anterior director y las dos profesoras a las que algunas de las menores dicen que le contaron lo ocurrido, por su posible participación o encubrimiento.



