
La policía brasileña ha rescatado en Sorocaba, en el estado de Sao Paulo (Brasil), a una niña de seis años que llevaba toda su vida encerrada en una habitación en condiciones de absoluto abandono. La menor jamás había ido al colegio, no había recibido ninguna vacuna y ni siquiera había aprendido a hablar.
El caso salió a la luz gracias a una denuncia anónima que alertó a las autoridades, según informa la agencia brasileña Universo Online y recoge también el Daily Mail. Cuando los agentes irrumpieron en la vivienda, se encontraron con una escena estremecedora: la niña permanecía en una habitación oscura y mugrienta, con las paredes manchadas y la silueta de su espalda marcada en una de ellas. Su único compañero era un viejo osito de peluche.
Una vida reducida al abandono
La consejera de protección infantil Ligia Guerra explicó que la pequeña estaba "muy apática y deslumbrada por todo". Añadió que su cabello estaba "enredado" y parecía "como si nunca hubiera sido lavado". La menor no había probado ningún alimento sólido en todo el día y la policía confirmó que su dieta consistía únicamente en líquidos. Apenas era capaz de comunicarse y lo hacía mediante sonidos.
Tras su rescate, fue trasladada a un hospital para someterse a un examen médico y posteriormente ingresada en un centro de acogida infantil.
Los padres de la niña fueron detenidos y acusados de detención ilegal. La jefa de la policía, Renata Zanin, declaró que la madre "no puede comprender la gravedad de la situación", y que durante el interrogatorio "dio respuestas evasivas" y "no mostró ningún remordimiento".

