LOE

El Consejo de Ministros adelantado a este jueves ha aprobado la reforma educativa que reduce las clases de lengua y literatura en 25 horas y eleva las de matemáticas y lengua extranjera en 45. También supone la imposición de Educación para la Ciudadanía, que no se ha consensuado y que, según sus detractores, su único objetivo es adoctrinar e imponer en los centros educativos la ideología del Gobierno. Para la Conferencia Episcopal "sólo cabe que se retire" la asignatura o "movilizarse en los niveles de opinión pública y de objeción de conciencia". Las comunidades gobernadas por el PP aplicarán la nueva materia en su número mínimo de horas.

El Ministerio de Educación ha informado en un comunicado de los aspectos básicos de la regulación de la asignatura de Religión. Esta asignatura será voluntaria, quienes no la deseen tendrán una "debida atención educativa", sus profesores serán contratados indefinidamente y la retirada de la declaración de idoneidad, que les conceden los responsables de cada confesión, habrá de ser "debidamente justificada" y "ajustarse a derecho". Sin embargo, no se especifica en qué va a consistir esa "debida atención educativa". Estos mismos términos los utilizó el secretario general de Educación el mes pasado. Alejandro Tiana señaló además que los niños que no cursaran Religión ni Historia de las religiones podrían irse a casa. Los obispos han reconocido que "permanecen dificultades fundamentales". 

El abogado general de la Generalidad valenciana, José Marí Olano, ha señalado que se considerará atentado a la autoridad las agresiones graves a profesores dependientes de la conselleria de Cultura, Educación y Deportes, al tiempo que ha resaltado que asumirá la defensa de los ocho docentes que la han solicitado hasta el momento, según han informado fuentes de la administración autonómica. Olano indicó que se trata de una actuación "novedosa" que pretende "intensificar la protección jurídica del personal docente" de la Comunidad.

La asignatura Educación para la Ciudadanía ha provocado el rechazo de buena parte de la sociedad. Este sábado, decenas de personas se concentraron en la madrileña Plaza Mayor contra esta materia. Este martes, el Consejo Escolar del Estado ha demandado incluir en la asignatura "los distintos modelos familiares y de convivencia", los derechos de las lesbianas, gays y transexuales, así como de las personas inmigrantes. Además, proponen que la Religión salga del horario lectivo. A su vez, el borrador del Gobierno sobre las enseñanzas mínimas en Secundaria plantea que los niños que no estudien Religión ni Historia de las religiones podrán irse a casa.

El secretario general del PP, Ángel Acebes, ha denunciado que la Ley Orgánica de la Enseñanza (LOE) ahonda en la falta de autoridad del profesorado; y que por tanto, esta política "indulgente y permisiva del PSOE", ha causado "verdaderos estragos en la enseñanza y en la convivencia". A su parecer, los valores inculcados por "una cultura progre" han eliminado la cultura del esfuerzo, el mérito y el respeto. Ante esta crispación educativa, Ana Pastor ha promovido una ley contra la violencia escolar. Este proyecto de Ley para promover la convivencia escolar y contra la violencia escolar, apostará por aumentar las horas de tutoría y "suprimir la posibilidad de novillos colectivos". Para erradicar el principio del "todo vale" consagrado por el Gobierno.

Tras acordarse que serán los propios centros educativos los que decidirán en qué franja horaria impartirán la asignatura de Religión, el borrador del Gobierno sobre las enseñanzas mínimas en Secundaria da un paso más. Plantea que los niños que no estudien Religión ni Historia de las religiones podrán irse a casa si el centro educativo así lo establece. El vicepresidente primero y portavoz de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha tachado esta medida de "tomadura de pelo".

La Confederación Nacional Católica de Asociaciones de Padres de Alumnos (CONCAPA) ha reclamado este martes que la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, creada con la LOE, forme a los estudiantes en el valor del perdón como elemento "esencial e imprescindible" que deben manifestar "quienes contravengan la legalidad o lesionen derechos de terceros como condición previa a cualquier pacto o reducción de condena". Desde la CONCAPA se critica al Ministerio de Educación y Ciencia por "ignorar" a los representantes de las familias. Este lunes, la Unión Democrática de Estudiantes ha reclamado que los contenidos de esta materia se limiten a la transmisión de los principios constitucionales.

La asignatura Educación para la Ciudadanía que el Gobierno ha incorporado a la LOE no ha hecho sino provocar rechazo entre padres y alumnos. La organización Profesionales por la Ética ya ha puesto a disposición de las familias una guía donde explican cómo tienen que actuar aquellos padres que no quieren que sus hijos estudien la materia. La plataforma Novillada.Org ha animado a los estudiantes, a través de concentraciones, a no asistir a clases de una asignatura que consideran "ideologizante". Además, han convocado una manifestación para el próximo 18 en Madrid. Por su parte, la Unión Democrática de Estudiantes reclama que los contenidos de esta materia se limiten a la transmisión de los principios constitucionales.

La organización Profesionales por la Ética distribuirá cuatro millones de guías para la objeción de conciencia contra la materia Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, con un modelo de carta para que los padres que lo deseen comuniquen al centro escolar la negativa de que sus hijos la cursen. A través de esta asignatura los niños tendrán la obligación de aprender, entre otras cosas, que tener dos papás o dos mamás es tan normal como pertenecer a una familia tradicional. La organización asegura que "nadie podría forzar" a los alumnos a asistir a esas clases y que "cualquier represalia" de orden académico o disciplinario debe ser "denunciada y recurrida" ante los tribunales hasta lograr, si fuera necesario, "el amparo del Tribunal Constitucional."