
El presidente del Partido Popular de Canarias, Manuel Domínguez, ha señalado que Europa se tiene que involucrar directamente en la gestión de la crisis migratoria que afecta al archipiélago y que es la "mayor crisis desde el año 2006", lo que "ha desbordado por completo" las islas, de ahí que urgió el apoyo de la Unión Europea.
Domínguez ha realizado estas declaraciones durante un encuentro con los representantes vecinales del barrio de La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria para atender las reivindicaciones de los residentes en la zona, donde se ubica el Canarias 50, un antiguo cuartel que opera desde hace tres años como centro de primera acogida para inmigrantes irregulares. El también vicepresidente del Gobierno autonómico, ha asegurado que Canarias "no puede más" en lo que se refiere a la atención a los personas que arriban a las costas de forma ilegal. "No soporta más presión, no tiene capacidad para poder atender a los inmigrantes como se merecen".
Las Islas Canarias son la "puerta de entrada" de la inmigración irregular en Europa, y ello hace que sea complicado prever si la actual crisis podría aumentar, con las repercusiones que ello supondría. "Canarias no puede tener un gasto ordinario que supera los 150 millones de euros para acoger a personas que llegan de manera irregular". En paralelo, Domínguez ha apuntado que mientras los canarios observan en primera línea que "se están dejando de llevar a cabo otras políticas para atender de manera humanitaria y solidaria, como no podría ser de otra manera, a quienes alcanzan" sus costas a bordo de pateras o cayucos.
Así, insta a buscar "cuanto antes" soluciones que "pongan freno a esta crisis migratoria y al drama que representa" porque "miles de seres humanos han perdido la vida en el mar durante los últimos cinco años en la búsqueda de un futuro mejor", recordando que la "Ruta Atlántica es una de las más peligrosas del mundo y ante ello hay que actuar con urgencia y con responsabilidad".
En este contexto de incertidumbre, el presidente del PP canario aboga por el cumplimiento del Pacto de Migración y Asilo, así como por un mayor control de las fronteras, incidiendo en que el papel de Europa en ambos sentidos es "determinante", a lo que ha agregado que trabajar en origen con los principales países emisores de inmigrantes irregulares "es otra de las asignaturas pendientes que, cuanto antes, debe ponerse sobre la mesa, como defiende el PP en Europa".

