Menú

Castilla y León

Conrado Íscar, presidente de la Diputación de Valladolid: "Nos tienen abandonados, no creen en el mundo rural"

El líder de la diputación ha denunciado el abandono del medio rural y reclama un mayor apoyo institucional.

Jiménez Losantos entrevista a Conrado Íscar, presidente de la Diputación de Valladolid

El audio empezará a sonar cuando acabe el anuncio

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, ha intervenido esta mañana en el programa Es la mañana de Federico, emitido desde la capital vallisoletana en un especial de esRadio. Durante la entrevista, Íscar ha sido tajante: "A nivel nacional nos tienen abandonados, no creen en el mundo rural y no es que no nos ayuden, es que, encima, nos ponen palos en la rueda todos los días".

Íscar ha mostrado su rechazo al concepto de "España vaciada", una expresión que considera errónea, aunque reconoce que los desafíos que se agrupan bajo ese nombre son reales y urgentes: "En esos retos son imprescindibles las diputaciones provinciales".

Más allá de lo simbólico, la despoblación es una realidad concreta. En Castilla y León, el 85 % del territorio es rural, pero solo lo habita el 20 % de la población. En Valladolid, la situación no es mejor: "La realidad de 225 municipios, 9 pedanías, de los cuales 87 tienen menos de 125 habitantes", ha explicado el presidente.

En la última década, la provincia ha perdido más de 13.000 habitantes, especialmente en las zonas rurales. A pesar de los fondos europeos y los planes estatales, los pequeños municipios siguen sufriendo el envejecimiento, el cierre de escuelas y la falta de relevo generacional.

Una Administración cercana

"Desde la Diputación son muchas las acciones de todo tipo, dentro de las competencias —que no tenemos muchas—, pero hemos demostrado y demostramos cada día que somos una administración local, cercana, y que nuestra competencia es intentar, en la medida de lo posible, solucionar cualquier problema que tenga un habitante de la provincia de Valladolid", explicaba Íscar.

Uno de los principales retos es el cambio generacional en las empresas, que no encuentran continuidad en los jóvenes. "Es un gran problema, pero hemos observado que ha habido un antes y un después", refiriéndose a las mejoras en los servicios: "Hemos notado que, gracias a los servicios, cada vez tenemos más y de mayor calidad, tal y como decía el presidente Mañueco". Aunque la digitalización, los centros de salud y las infraestructuras básicas siguen siendo claves para afincar a la población en zonas rurales.

Íscar ha destacado un logro especialmente simbólico: "En cuanto a las guarderías, que, tal y como ha apuntado el presidente de la Junta de Castilla y León, era impensable en el mundo rural, ahora tenemos una red que permite la conciliación". Un hecho que conlleva consecuencias positivas, porque gracias a eso: "Cada vez más hay gente joven que se plantea que su proyecto de vida se desarrolle en un municipio", afirmó, aunque matizó que aún queda mucho por hacer.

Un problema añadido

"Tenemos el problema añadido de la vivienda. Tal y como comentaba el alcalde, aunque cuesta entenderlo, los pueblos se van vaciando, pero los que se plantean venir a vivir no encuentran una vivienda".

Este fenómeno se repite en muchas provincias: casas en mal estado, falta de suelo disponible, trabas burocráticas o herencias sin regularizar. Todo ello frena a quienes estarían dispuestos a instalarse en el medio rural.

Milla de oro del vino

La entrevista también dejó espacio para hablar del valor económico y turístico del mundo rural, especialmente en sectores clave como el vino o los productos agroalimentarios.

"Dentro de las acciones que llevamos a cabo en la Diputación Provincial, y siempre estando al lado de quien genera esa riqueza, de quien genera la economía y la potencia, tenemos ese proyecto ‘La Milla de Oro del Vino’, que es el eje vertebrador, el río Duero, una distancia de aproximadamente 34 kilómetros entre Tudela y Peñafiel", explicaba el presidente de la Diputación vallisoletana.

Este tramo, conocido como la "Milla de Oro del Vino", concentra algunas de las bodegas más prestigiosas de España, como Pago de Carraovejas, Vega Sicilia o Emilio Moro, todas ellas amparadas por la Denominación de Origen Ribera del Duero. La zona es también un motor turístico y gastronómico, generando empleo y atracción en el medio rural. Desde la Diputación se impulsa este eje como símbolo de identidad, desarrollo económico y dinamización territorial para la provincia.

Temas

En España

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Libro
    • Curso
    • Inversión