El escultor Nacho Palau ha reaccionado ante las cámaras a la deriva de su ex, el cantante Miguel Bosé, con el que estuvo nada menos que veintiséis años unido.
La discreción de Palau, del cual apenas se conocían imágenes durante su larga etapa con Miguel Bosé, ahora se ha multiplicado, puesto que en octubre se celebra el juicio de la filiación de los hijos que tuvo con el cantante.
Ahora, Palau vive aislado en una casa en medio del campo de un pueblo de Valencia. Las cámaras de Sálvame le pillaron por sorpresa cargando unas bolsas en el maletero del coche.
Preguntado por Miguel Bosé y sus declaraciones contra el uso de las mascarillas y las vacunas e incluso negando la existencia del mismo virus que mató a su madre el mes de marzo, Palau guarda absoluto silencio.
Cualquier palabra suya podría ser tenida en cuenta en el juicio, y la respuesta fue el silencio absoluto. Su única preocupación, los niños, que iban a salir en breves momentos. "Me dejas, que tengo a los niños esperando", dijo Palau, cabizbajo.
No obstante, y pese a la campaña mediática orquestada por Miguel Bosé alimentando una polémica concentración antimascarillas en Madrid, y la también fuerte reacción en contra que también ha generado, Palau no ha dado la cara tampoco por el cantante. Ni a favor, ni en contra.