Miguel Bosé y Nacho Palau acercan posiciones por el bien de sus hijos. Este verano ya se ha producido un reencuentro familiar entre ellos y sus cuatro hijos, separados tras el juicio por la filiación de los mismos que ganó Bosé, y lo han hecho con l promesa de reencontrarse en un futuro cercano.
La expareja ha escogido Mallorca como escenario para disfrutar de unas jornadas de playa con los pequeños. Olvidándose de la dolorosa batalla legal y de la lucha contra el cáncer, afortunadamente superada, de Nacho Palau, éste y Miguel Bosé han disfrutado de lo lindo de Ivo, Telmo, Diego y Tadeo.
Todo se produce, tal y como señaló Isabel González en Y ahora Sonsoles, a modo de iniciativa del cantante para "suavizar su imagen en España" y "relajar un poco el tema" con su ex. Por eso, Bosé ha exprimido el tiempo con todos ellos en Palma de Mallorca visitando también el museo de Rafa Nadal, uno de los hitos de la isla.
Bien es cierto que ante Bosé se abre un nuevo y positivo horizonte profesional, con el estreno de su documental, el éxito de su serie y nuevos conciertos y proyectos musicales. Palau hace lo mismo tras haber superado su grave enfermedad, en cuya lucha ha estado inmerso los últimos meses.
Tras esto, los niños volviendo a separarse, con los de Bosé acompañando a su padre a México, donde residen. Pero todo indica que Bosé y Palau han acercado posiciones y que esta estampa empezará a repetirse más a menudo. Escenas todas ellas de reunificación familiar más allá incluso de la imposición del juez.