Airbus ha finalizado el ensamblaje del primer prototipo del RPAS Sirtap, su nuevo sistema aéreo táctico remotamente tripulado de altas prestaciones. La aeronave se encuentra ya preparada para iniciar la campaña de ensayos en tierra en las instalaciones de Airbus Defence and Space en Getafe (Madrid), en una fase clave del programa que marcará el inicio del proceso de validación estructural y tecnológica del aparato.
Estas pruebas en tierra incluirán evaluaciones estructurales y análisis del funcionamiento de los principales componentes, tanto del sistema como del software de a bordo. Está previsto que estas tareas se desarrollen durante los próximos meses y concluyan con el vuelo inaugural, programado antes de finales de 2025 en el Centro de Ensayos para Sistemas No Tripulados (CEUS) del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), situado en Huelva.
La campaña de ensayos en vuelo continuará a lo largo de 2026 en el CEUS, y resultará fundamental para obtener la certificación de tipo en aeronavegabilidad. Este proceso permitirá garantizar que el Sirtap cumple con los más altos estándares internacionales de seguridad, fiabilidad y rendimiento operativo. Airbus prevé que, una vez superadas todas las etapas de validación, la primera unidad del sistema pueda entregarse al Ejército del Aire y del Espacio en 2027.
El Ministerio de Defensa adquirió en noviembre de 2023 un total de nueve sistemas Sirtap, cada uno compuesto por tres aeronaves remotamente tripuladas y una estación de control en tierra. En total, serán 27 drones y nueve estaciones las que reforzarán la capacidad de vigilancia, reconocimiento y apoyo táctico de las Fuerzas Armadas españolas. Además, se suministrarán dos simuladores para la formación de los operadores, cuyo diseño ya ha superado con éxito la revisión crítica.
El departamento de Margarita Robles dio luz verde a la fabricación del Sirtap en junio de 2024, por lo que la construcción de este primer prototipo se ha llevado a cabo en un año. El RPAS Sirtap es uno de los Programas Especiales de Modernización (PEM) del Ejército del Aire. Se trata de un sistema diseñado para misiones de vigilancia, reconocimiento e inteligencia (ISR, por sus siglas en inglés) en todo tipo de condiciones climáticas, aunque el proyecto incluye dotar a estas aeronaves de capacidad de ataque a suelo en un futuro.
Estos RPAS tienen un tamaño 7,3 metros de largo y una envergadura de 12 metros –de punta a punta de cada ala–, además de una altura de 2,2 metros y un peso de 750 kilos. Es un tipo de aeronave con la que no cuenta en estos momentos el Ejército del Aire y el Espacio, y que están un peldaño por debajo en tamaño y prestaciones que los MQ-9 Predator B que prestan servicio actualmente en Talavera la Real (Badajoz) y que también van a ser armados.
A finales del pasado mes de enero, Airbus y Navantia firmaron un acuerdo para dotar a este RPAS con la capacidad de ser embarcado en buques como el BPE Juan Carlos I, el buque insignia de la Armada española. Los pilares de esa integración entre los dos sistemas se centrarán en Mando y control (C2), integración del sistema de combate y soporte a la navegación, incluyendo operaciones de despegue y aterrizaje.