Aquí no se libra nadie del deporte nacional: El hablar por hablar sin conocimiento y así todo el mundo es manipulable en un sentido o en otro,adolecemos de sentido crítico totalmente, basta con que alguien juegue con nuestras bajas pasiones para que demos crédito a falsos esteretípos.

Por supuesto, Ruro. Los funcionarios, que han obtenido su plaza mediante una oposición, no le deben su puesto a ningún partido político sino a su esfuerzo: no conozco el caso de ningún funcionario al que hayan ido a buscarlo a casa.

En cambio, los empleados en los chiringuitos --nombre con el que se conoce en Asturias las empresas públicas en las que el mérito exigido es el del carné del partido-- son intocables: sólo en Asturias, según publica hoy La Nueva España, de Oviedo, hay más de 1.700.

Naturalmente que no, son los votos cautivos!!

No me creo una mierda. No tocan el sueldo de los empleados públicos ... hasta después de las autonómicas andaluzas.

Hombre,¿si no como va a poder seguir chupando la familia de Chavez si le congelan el sueldo?
¿Y que van a hacer todos esos pobres asesores si les hacen recortes?
¿Y que será de la cohorte de dedazos y a su vez liberados que se pasan el dís lamiendole el culo al gobierno?
Si es que hay que ser un poco comprensivos con esta buena gente.
Asco de gobierno.

De la Vega ¿cuando te vas a poner el BURKA?. Estamos cansados de ver esa tu cara y así al mismo tiempo nos ahorrarias gastos y mas gastos de tus vestuarios.
Con un burka negro y otro blanco solucionabas una importante rebaja en el gasto público.

Como decía ayer un contertulio, el PSOE no hace política social, hace política electoral.

¡Cómo va a tocar los pilares de esas políticas! ¡a mi los subvencionados!

Y sobre lo que se puede hacer..
¿para qué están los perros de la guerra subvencionados?

Para morder al que intente quitarles las tajada.

Me acuerdo de cuando ocurría algo parecido con Felipe González. Se hacían entrevistas en la televisión sobre la crisis, sobre la falta de trabajo... La consigna del Gobierno y sus afines era que eso no lo arreglaba nadie, que Aznar no era la solución. Quitar el servicio militar obligatorio se veía más difícil -se veía imposible y parecía demagogia pura- que el hecho de que se fuera ahora mismo la crisis en el plazo de unos meses. Bajar impuestos también era demagogia según los izquierdistas, era imposible (Zapatero casi estaba en el cole por ese entonces, no se acordará, porque ademas tiene mala memoria). Y llegó Aznar, y se bajaron impuestos; y el sueño imposible de la mili se hizo realidad, nuestros hijos no la hicieron.

Con esto me gustaría transmitir que es perfectamente posible quitar las subvenciones a los sindicatos, recortar los poderes y cerrarle el grifo a las autonomías, etc. Y es posible bajar impuestos, y es posible reducir el paro... Sólo tiene que venir la persona capaz de hacerlo.

Las empresas públicas son un invento de los políticos para poder hacer lo que les venga en gana con infinitamente menos controles que si se hacen a través de los correspondientes ministerios u otros órganos direcos del Estado, Autonomías o aAyuntamientos. En ellos se suele colocar a las personas "de confianza" (lo que el pueblo llano llamamos "enchufados o familiares" de los políticos". Hasta ahora, en lo que he podido observar sobre el "tijeretazo" de ZP, casi todo lo que hay es cara a la galería y dándoles siempre al más sufrido (empleados públicos escasamente "mileuristas", pensionistas, dependientes, etc) con simulacro de recortes a ministros (yo les multiplicaba el sueldo si son eficientes y se conforman "sólo con su sueldo") pero no hay una sola medida de calado: no se recortan la enorme cantidad de gastos superfluos, de despilfarro, de compra del voto de determinados colectivos (los de la ceja entre otros), de los miles y miles de "asesores" a dedo, no se ve intención de atacar el problema de la "casta política" que, por una parte, detenta enormes privilegios económicos y que, por otra, es una de las mayores preocupaciones de la sociedad española por la idea que apercibimos de que se quedan con todo en cuanto llegan al sillón público. Además, da la sensación de que está pactado con los sindicatos mayoritarios (CCOO y UGT), pues no se habla de reformas estructurales del mercado de trabajo, no se toca a esas empresas públicas plagadas de enchufados, no se toca otra cosa que el sector funcionarial precisamente donde esos sindicatos no destacan absolutamente como en el sector privado. Todo esto huele muy mal. ¡ZP dimisión!

Lo que me imaginaba,....... todos los empleados colocados a dedo, toda la parentela de estos sinvergüenzas a esos ni tocarlos ¿no?