Desastre burocrático sin paliativos. La Generalidad ordena el cierre de bares y restaurantes durante las dos próximas semanas, pero elabora un decreto que no aguanta ni una lectura rápida. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha avisado al gobierno regional de que el documento presentado presenta graves defectos de forma y le urge a solventarlos a la mayor brevedad. El texto carece de firma, de fecha y hasta de número de decreto.
Antes del anuncio, la Generalidad había sondeado al TSJC dados los antecedentes de suspensiones de medidas relativas a la pandemia del coronavirus. El pasado verano, un juez de Lérida tumbó una orden para que los bares y restaurantes cerraran antes de medianoche y una semanas antes fue el propio TSJC quien enmendó una serie de disposiciones autonómicas relativas a teatros, cines, gimnasios e instalaciones deportivas.
En esta ocasión, la Generalidad se ha querido evitar una sorpresa y ha consultado previamente a los magistrados, quienes se han llevado la sorpresa de que el decreto que les pasaban era una auténtica chapuza. Así, han remitido una nota al gobierno regional para que subsanara los errores de forma y "se concreten los puntos de su suplico que afecten a derechos fundamentales".
Convencidos de que saldrá adelante
Dada la sintonía con el TSJC, el Govern está convencido de que la resolución judicial que se conocerá este viernes será favorable a sus restricciones a la actividad hostelera, razón por la que ha enviado un comunicado a los medios en el que afirma que la resolución que publicará en la madrugada del viernes "incluirá una disposición en la que se dejará en suspenso, hasta que el TSJC se pronuncie, tres aspectos que afectan a los derechos fundamentales: la prohibición de reuniones de más de seis personas, la suspensión de la actividad presencial en las universidades y la limitación del aforo en las actividades de culto".
A continuación da por sentado que el TSJC avalará el resto de medidas, entre ellas el controvertido cierre de bares y restaurantes: "Por tanto, los demás contenidos de la resolución entrarán en vigor esta misma madrugada".
El número dos del departamento de Salud, el epidemiólogo Josep Maria Argimon, ha apuntado este jueves que las medidas durarán como mínimo dos semanas aunque mejoren los índices de referencia de la pandemia y ha dejado la puerta abierta a prolongar las prohibiciones por más tiempo.